Luego de que Luis Rubiales intentara naturalizar y hacer pasar por consentido el acto de acoso cometido contra Jennifer Hermoso en los festejos por el Mundial Femenino, varias jugadoras manifestaron públicamente su apoyo a la futbolista y su rechazo hacia la violencia misógina contra las deportistas encarnada en la actitud del presidente de la RFEF.

Luis Rubiales decidió no renunciar como presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y culpabilizó a Jennifer Hermoso por el beso forzado que le dio tras la consagración mundialista. En respuesta, varias futbolistas se manifestaron sobre la situación en redes sociales. "Esto es inaceptable. Se acabó. Contigo compañera”, escribió la dos veces ganadora del Balón de Oro Alexia Putellas.

"Hay límites que no se pueden cruzar y esto no lo podemos tolerar. Estamos contigo compañera", escribió por su parte Aitana Bonmatí, la futbolista declarada mejor jugadora del Mundial. En la misma línea, Caroline Graham Hansen, jugadora del Barcelona, publicó: “Todo esto son mentiras. Todos vemos lo que realmente pasó".

A su vez, Ana-Maria Crnogorcevic, del seleccionado suizo, posteó: "Estoy flipando… se acabó, que le jodan a esa mierda, que le jodan a las mentiras. Esto es de locos. Contigo Jenni siempre". En tanto, la arquera Cata Coll se lamentó por el hecho de que un acto masculino de acoso haya opacado la alegría de las jugadoras: "Qué pena me da que 23 futbolistas no seamos las protagonistas… se acabó! Contigo a muerte Jenni Hermoso".

Rubiales fue ampliamente repudiado por darle un beso en la boca a Hermoso cuando la jugadora se acercaba a saludarlo en el estadio, en lo posterior al triunfo que les valió a las españolas la Copa del Mundo. En su momento, la futbolista indicó que no le gustó el gesto y optó por concentrarse en celebrar el título con sus compañeras, aunque más tarde tildó de inaceptable la situación a través del sindicato de jugadoras.

Por su parte, el dirigente se atrevió a sostener que su accionar "fue consentido”. En las últimas horas, relató: “Esta jugadora falló un penalti, yo tengo una gran relación con todas las jugadoras, con todos los miembros de la expedición, hemos sido una familia durante más de un mes, y tuvimos momentos cariñosísimos en esta concentración".

"Ella fue la que me subió en brazos y la que me acercó a su cuerpo, nos abrazamos y yo le dije: ‘Olvídate del penalti, has estado fantástica, sin ti no hubiéramos ganado este mundial’. Ella me contestó: ‘Eres un crack’. Y yo le dije: ‘¿Un piquito?’, Y ella me dijo: ‘Vale’”, aseguró a continuación y destacó como prueba a su favor el hecho de que la jugadora se fue “riéndose”.

En contraste, Hermoso comunicó que FUTPRO, su sindicato, la representaría públicamente en lo relativo al episodio de acoso, con lo cual desde la asociación gremial manifestaron “nuestra firme y rotunda condena ante conductas que atenten contra la dignidad de las mujeres” y calificaron de “inaceptable” el comportamiento de Rubiales.