En las últimas horas, se conoció un nuevo informe médico que podría influir en el rumbo de la causa: Fernando Báez Sosa llegó con vida al hospital y su corazón continuó latiendo hasta 6 horas después del ataque. Cómo podría modificarse la investigación con esta nueva prueba.
En la audiencia final del juicio por la muerte de Fernando, se conocieron las condenas para los rugbiers. Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Matías Benicelli y Luciano Pertossi recibieron la pena de prisión perpetua por el delito de homicidio doblemente agravado por su comisión por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas en concurso ideal con lesiones leves. En cambio, Lucas Pertossi, Blas Cinalli y Ayrton Viollaz recibieron penas de 15 años de cárcel como partícipes secundarios del delito.
Este informe que se conoce recién ahora, tiene que ver con que los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°1 de Dolores no habían hecho a lugar a que se pida en tiempo y forma la historia clínica del Hospital Municipal de Villa Gesell y se anexe a la causa. Esta nueva prueba cuenta con electrocardiogramas que indican que Fernando Báez Sosa estuvo vivo hasta 6 horas después del ataque de los rugbiers.
Si bien esta información no cotradice la responsabilidad de los acusados, hubo personas que omitieron parte de la verdad. La doctora Silvana Garibaldi Larrosa, quien asistió a Fernando esa madrugada en la puerta del boliche, declaró que el chico "no tenía posibilidad de sobrevida, cuando llegó la ambulancia ya estaba fallecido, no tenía ningún signo vital". Sin embargo, en el Hospital de Villa Gesell lograron encontrarle el pulso y registrar los latidos del corazón del adolescente al menos desde las 5.27 hasta aproximadamente las 6 de la mañana. Esta nueva información tomó por sorpresa a los familiares de Fernando y a su equipo de abogados, que no tenían idea de la existencia de este parte médico.
Por su parte, la defensa de los rugbiers presentaron en febrero una apelación en relación a la sentencia recibida por el TOC 1 de Dolores. Ahora, el caso está en manos de la Cámara de Casación bonaerense. Allí se deberá decidir si estas sentencias quedan firmes o si se revisan las condenas.
Burlando sobre el giro en la causa de Fernando Báez Sosa
Fernando Burlando, abogado de la familia, descartó que este nuevo parte medico pueda alterar la situación de los condenados. "Esto no modifica nada. Incluso, fue una prueba que ni siquiera quiso reproducir la defensa", explicó.
"Lo que se probó en el debate es que Fernando murió a las 5.05, si mal no recuerdo, porque ya no tenía signos vitales", continuó. Y agregó: "Después, intentaron todo tipo de mecanismos de reanimación".
Se refirió también a las posibles causas que mantuvieron vivo a Fernando hasta las primeras horas de la mañana del día siguiente al ataque: "Eso pudo ser por el uso de adrenalina, porque se le pusieron 15 ampollas de medicamentos", cerró.
