Gran Bretaña está atento a los "riesgos potenciales" que pueden acarrear el envío de aviones de combate a Ucrania, dijo el portavoz del primer ministro Rishi Sunak. En su reciente visita a la isla, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, reclamó el urgente envío de aviones cazas para hacer frente a la aviación rusa. “Cuando antes tengamos las armas pesadas y los aviones, antes se acabará la guerra”, dijo Zelenski.

Los británicos sonrieron para la foto y le dieron unas palmaditas amistosas al ucraniano, pero, muy británicamente, no le prometieron nada.

Y cuando Zelenski ya volaba hacia París, el portavoz de Sunak dijo: "En primer lugar, no hemos tomado una decisión en términos de suministro de aviones, lo estamos considerando. El Reino Unido si está en proceso de proporcionar tanques Challenger. Tomamos estas decisiones con cuidado porque somos conscientes de los posibles riesgos de escalada".

"En todo momento -insistió el portavoz- hemos confiado en que el enfoque que estamos adoptando es la mejor y más rápida manera de ayudar a Ucrania a poner fin a esta guerra, que obviamente es de interés para todos. Y es Rusia la que continúa tomando medidas de escalada con su bombardeo de civiles y la que continúa su guerra ilegal en Ucrania.

“El Reino Unido tiene un número significativo de Typhoon y F-35”, dijo el portavoz de Rishi Sunak. “Por supuesto, nunca haríamos nada que pusiera en riesgo la seguridad del Reino Unido”.

El envío de Typhoon requeriría el permiso de Italia, España y Alemania, mientras que los F-35 necesitarían el consentimiento de Estados Unidos, dijo el funcionario.