Murió Edson Arantes do Nascimento, más conocido como Pelé. Así, el astro brasileño se suma al panteón de los héroes del fútbol que ya no forman parte de este mundo. El más reciente había sido el nuestro, Diego Armando Maradona. Ahora, tras años de encuentros felices y declaraciones explosivas, amores y odios, acusaciones y halagos, ambos se reencuentran en el más allá.

El primer vínculo entre ambos fue en 1979, cuando el Diego tenía solo 18 años. En enero de ese año, el Pelusa jugaba el Sudamericano Sub 20 y en una entrevista para El Gráfico había confesado que tenía otro sueño, además de ser campeón del mundo: conocer a O Rei del fútbol.

La reunión tardó un par de meses en concretarse. Su representante, Jorge Czyterspiller, y Don Diego se habían encargado de los trámites para volar a Río de Janeiro. Allí los esperaba Pelé, en su casa de Copacabana, donde se concretó la famosa foto que inmortalizó el encuentro entre quien ya era el mejor jugador del planeta (retirado hacía dos años), con quien sería su heredero.

Ya cuando Maradona era considerado el mejor jugador del mundo, tras coronarse en México 86, previo paso por Boca, Barcelona y estando en el Napoli, los medios empezaron a hacer las típicas comparaciones. Pero además de las comparaciones, venían con rumores malintencionados que los protagonistas empezaron a tener en su cabeza.

En los meses previos al mundial que ganaría Argentina en 1986, Pelé se había ofrecido para volver a jugar para la selección brasileña a los 45 años, nueve años después de su retiro. Entonces, Diego le recomendó que estaba más para "recibir asistencia psiquiátrica" que para un retorno al fútbol, que finalmente no se dio. "Me pareció de mal gusto y una falta de respeto que declarara que yo necesitaba asistencia psiquiátrica. Decidí no responderle, pues lo que expresó es cosa de niños y este no es un Mundial juvenil", respondió un tiempo después el brasileño.

Así fue como Maradona dejó de referirse al brasileño con admiración para empezar a denigrarlo, por ejemplo, llamándolo "el morocho". Esto llegó a su pico cuando en 1998, Diego dijo una de sus más célebres frases: "Pelé debutó con un pibe". Esto tenía que ver con una supuesta confusión, ya que a los 15 años Pelé había compartido equipo con un jugador homosexual, hecho suficiente para que se iniciara el rumor más adelante.

Ese mismo año, lo acusó de "venderse" al organismo mundial del fútbol, con el que él siempre se enfrentó: "Pelé es un esclavo, le vendió el corazón a la FIFA. Y cuando la FIFA lo patea se quiere amigar con nosotros los jugadores. Él viene a mi país y me quiere ayudar a mí, pero cuando tuvo que ayudar a Garrincha, que se murió de cirrosis, no lo hizo".

En algún otro momento, el ex Santos se refirió así al Diego exfutbolista: "Maradona es un mal ejemplo. Fue un excelente jugador pero, por desgracia, todo el mundo puede ver lo que hizo con su vida". Aunque también había querido bajarle el precio a su carrera deportiva: "Basta con ver los hechos: yo fui netamente más completo. ¿Saben cuántos goles de cabeza hizo Diego? Les respondo: ninguno. Pelé, cien. ¿Y de derecha? Yo hice en total 1281 goles. ¿Eso no les dice nada?".

Sin embargo, en 2005 volvieron a encontrarse y dejaron atrás las declaraciones explosivas. Diego invitó a su amado enemigo al programa que tenía entonces, "La Noche del Diez". El brasileño tocó la guitarra, Maradona cantó el tango "El Sueño Del Pibe" y hasta divirtieron al público con la pelota en un histórico "cabeza a cabeza".

Tras este encuentro hubo algunas que otras declaraciones cruzadas más, pero finalmente todo se calmó. Hubo encuentros en París, y en la previa del Mundial de 2018, en Moscú. Incluso Maradona dejó la frase "no más peleas", en son de paz.