Las calles fueron inundadas por millones de hinchas que festejaron el triunfo de la Selección argentina y aguardaron la llegada del micro de los jugadores este martes. El Obelisco fue uno de los epicentros de la fiesta, y por la noche se convirtió en escenario de una serie de enfrentamientos con la Policía. En medio de las piedas y las balas de goma, un grupo de ladrones aprovechó para asaltar un cajero del Banco Galicia.

La cantidad de personas en la 9 de Julio se había reducido considerablemente, pero un conjunto de fanáticos se entretuvo entre pintadas, un nuevo ingreso forzado al Obelisco y botellazos a los oficiales que intentaban desalojarlos. Mientras los bomberos y buena parte de los oficiales intentaban sacar a las personas que habían quedado atrapadas en el monumento, las cámaras de televisión que cubrían los hechos captaron el robo del cajero.

Las filmaciones muestran a un conjunto de hombres con camisetas y banderas argentinas que fuerzan la persiana de la sucursal del Galicia ubicada en Cerrito y Lavalle y salen cargando una impresora de gran tamaño. Acto seguido, se dirigen a una camioneta blanca que los esperaba a pocos metros y cargan el artefacto.

La policía interceptó la camioneta en Lavalle y Talcahuano y detuvo al conductor.

Frente a la denuncia del robo, algunos oficiales se acercaron a la sucursal, donde constataron que varios cajeros fueron violentados aunque los asaltantes no pudieron llevarse ninguna suma de dinero. La parte de atención al público se encontraba completamente revuelta, de lo que se deduce que fue allí donde encontraron la impresora robada.

Al poco tiempo, la policía interceptó la camioneta que protagonizó el robo en Lavalle y Talcahuano y detuvo al conductor.  El hombre se desentendió del asalto explicando, según detalló la agencia Télam,  que cuando circulaba frente al banco sintió un fuerte golpe en la parte trasera del vehículo y vio por el retrovisor que un grupo de hombres depositaba un objeto en el interior, por lo que aceleró con intenciones de huir.