El líder de Los Enanitos Verdes, Horacio “Marciano” Cantero, murió ayer a los 62 años tras estar internado en una sala de terapia intensiva de Clínica de Cuyo de Mendoza a causa de una dolencia renal. El bajista, autor y cantante había sido operado de urgencia la semana pasada y le habían extirpado un riñón y parte del bazo. “La situación era crítica”, confirmaron sus allegados.

Su hijo Javier Cantero agradeció “a todos los fans, a todos los amigos de la vida, a la familia, todos los rezos y el apoyo que hemos recibido estos días”. “Por más que estoy muy triste, miro estos 30 años que pude pasar con él. Cada día que con él fue un regalo. No puedo también dejar de estar feliz por el gran hombre que era y por todo el amor que le devolvieron en estos días”, expresó.

Por su parte, el hermano del artista, Eduardo Cantero, lo definió como “un ser de luz” y “una persona muy humilde”. A su vez, anunció que los restos de Marciano serán velados en el edificio de la Secretaria de Turismo y Cultura de Mendoza.

Marciano Cantero fue líder de Enanitos Verdes. Esta banda de rock se convirtió rápidamente en una referencia de la cultura nacional y también de Latinoamérica. Las crónicas dan cuenta que durante seis meses la banda dio 31 recitales en diversas ciudades del continente.

En 1989, la banda se separó y Cantero tuvo una experiencia solista. En esa etapa publicó dos álbumes: “Luna nueva” y “Beat Club”. Sin embargo, la leyenda de Enanitos Verdes revivió rápidamente y en 1992 el encuentro quedó plasmada en “Igual que ayer”.

Antes de la internación de Marciano, la banda venía de presentarse por ciudades de Latinoamérica y de Estados Unidos. En octubre, planeaba iniciar otra recorrida por Perú, México y Estados Unidos.