El presidente ruso, Vladimir Putin, no asistirá al funeral de Mikhail Gorbachov, el último líder de la Unión Soviética, según confirmaron desde el Kremlin. El vocero ruso Dimitry Peskov explicó que la agenda laboral del presidente Putin no le permite asistir al funeral, que se realizará el sábado.
En cambio, el líder ruso le presentó sus respeto al expresidente de la URSS en el hospital moscovita donde él falleció este martes, a los 91 años. Las reformas que impulsó este último colaboraron con el fin de la guerra fría, pero llevaron a la caída de la Unión Soviética, que ya fue criticada ampliamente por Putin en diversas ocasiones.
En el 2005, el actual presidente ruso afirmó que el final de la URSS fue "la catástrofe geopolítica más importante del siglo 20". Sin embargo, en el telegrama que le envió a la familia de Gorbachov para mandarles sus condolencias, expresó que el exlíder ruso fue "un político y hombre de estado con un enorme impacto sobre el curso de la historia mundial".
Este jueves, la televisión rusa mostró como Putin dejaba rosas rojas a un costado del ataúd de Gorbachov, en el hospital donde murió. Según explicaron desde el gobierno de Putin, decidió presentar sus respetos hoy porque el sábado no podrá asistir al funeral. El funeral del último presidente de la URSS será abierto al público, en la Casa de los Sindicatos. Luego, será enterrado en el cementerio Novodevichy, al lado de su esposa Raisa, que falleció en 1999.
El funeral de Gorbachov contará con muchas ausencias, además del presidente Putin. Una importante cantidad de líderes políticos internacionales, que asistirían en otras condiciones a presentarle sus respetos, tienen su ingreso a Rusia prohibido por la guerra en Ucrania y las sanciones sobre Rusia.