El Papa Francisco invitó a todos los obispos católicos del mundo a unirse en oración para pedir por la paz en Ucrania. El pedido en la consagración de Rusia y Ucrania al Corazón Inmaculado de María será el viernes 25 de marzo en la Basílica de San Pedro, detalló el vocero del Vaticano, Matteo Bruni.

El Sumo Pontífice lamentó que se esté condenando a “personas indefensas a una violencia brutal”. Asimsmo, advirtió que las imágenes de la invasión de Rusia a territorio ucraniano recuerdan a “las grandes guerras del siglo pasado”.

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"La tragedia de la guerra que está teniendo lugar en el corazón de Europa nos deja atónitos. Nunca pensamos que volveríamos a ver tales escenas, que recuerdan a las grandes guerras del siglo pasado", aseguró ayer. Francisco participó en las Terceras Jornadas Sociales Católicas Europeas en Bratislava (Eslovaquia), organizadas por la Conferencia Episcopal Europea, que planeaba dedicar el encuentro a la pandemia, pero que cambió por el conflicto bélico.

Para el Papa, "la humanidad se ve amenazada por un perverso abuso del poder". "El desgarrador grito de ayuda de nuestros hermanos y hermanas ucranianos urge como comunidad de creyentes no sólo a una reflexión seria, sino a llorar con ellos y hacer algo por ellos", dijo.

Jorge Bergoglio expresó que “sacuden las conciencias la sangre y las lágrimas de los niños, el sufrimiento de las mujeres y los hombres que defienden su tierra o huyen de la de las bombas”. Según Télam, valoró que la Iglesia se haya ayudado a miles de ucranianos con “material, refugio y hospitalidad".

La tragedia de la guerra que está teniendo lugar en el corazón de Europa nos deja atónitos. Nunca pensamos que volveríamos a ver tales escenas, que recuerdan a las grandes guerras del siglo pasado.

Por último, el líder del Vaticano pidió a los gobiernos que "no dejen ninguna piedra sin mover para detener la guerra y abrir un diálogo constructivo para poner fin a la inmensa tragedia humanitaria que está provocando". "Es urgente revisar el estilo y la eficacia del hacer política frente a los cambios que estamos presenciando a nivel internacional", declaró y señaló que la guerra "deja al mundo peor" y es "un fracaso de la política y de la Humanidad, una entrega vergonzosa a las fuerzas del mal".