Los gobernadores patagónicos, desde Tierra del Fuego hasta La Pampa realizaron una nueva reunión en la que se mostraron dispuestos a firmar acuerdos con el Gobierno y Nacional "en la medida que no vengan impuestos ni estén precedidos de condicionamientos".
En dicho cónclave, del que también participaron los intendentes, firmaron la Declaración de Puerto Madryn, por la que decidieron reactivar el Tratado de Santa Rosa, que se firmó en 1996 y habilita la creación de regiones y superestructuras compartidas para el desarrollo económico y social.
Los gobernadores también le marcaron la cancha al Gobierno Nacional y señalaron que deben establecer "un esquema nuevo de coparticipación acorde". Además, advirtieron que "el ajuste fiscal por si solo no garantiza ningún desarrollo".
En el encuentro, la lectura de la declaración quedó a cargo del gobernador fueguino Gustavo Melella, quien destacó que el documento no es una posición "a favor ni en contra de nadie"; por el contrario, afirmó que la mirada de los gobernadores patagónicos expresa "la del bien común".
Por medio de la declaración los gobernadores afirmaron que crearán un Foro Permanente de las Provincias Patagónicas con el fin de hacerle llegar las posiciones de los representantes de la región a los legisladores de ambas cámaras del Congreso.
Durante la reunión hablaron todos los gobernadores. El gobernador de Chubut, Ignacio Torres, de reciente conflicto con Milei, apuntó: "cuando se habla de alivio fiscal a las provincias es un error conceptual. El alivio fiscal es quitarle el pie de encima a la producción y al trabajo, es bajar impuestos. Eso es alivio fiscal. Ninguno de nosotros está pidiendo nada más ni menos que lo que establece la Constitución".
