El gobierno nacional llevó a cabo una reducción de cargos jerárquicos, muchos de ellos supuestamente vinculados a La Cámpora, en el PAMI, la obra social de los jubilados. Aparentemente, los directivos del organismo achicaron la estructura y eliminaron 30 altos puestos, de gerentes a subdirectores. Los de puestos más altos tenían sueldos de hasta $3.000.000.
Desde el gobierno afirman que son directivos que asumieron durante la gestión de Luana Volnovich en la institución. Según relataron, ninguno de los directivos echados de sus puestos se resistió y varios de ellos afirmaron que estaban esperando que termine la transición para renunciar.
Durante el último gobierno, la planta jerárquica del PAMI tenía 120 cargos directivos. La nueva gestión busca llevarlos a 80, con los 30 que ya se cerraron y 10 más, que se terminarán de concretar en los próximos días.
En esta gestión, el PAMI quedó a cargo de Esteban Leguizamo, quien se encargó de realizar el relevamiento del personal jerárquico para echar a los directivos de la última gestión. Desde el gobierno afirman que este recorte significa un ahorro del 24% en rangos jerárquicos, una reducción del 75% en Secretarías y Dirección Ejecutiva, un recorte del 33% en la cantidad de Gerencias y casi un 20% menos en Subgerencias.
El PAMI es uno de los organismos estatales más grandes, con 12 mil empleados en todo el país. Su trabajo está dedicado a atender a alrededor de 6 millones de jubilados y asegurarles el acceso a los medicamentos y tratamientos que necesitan.