Después de una búsqueda intensa de 11 días, encontraron a la mujer que había desaparecido la misma mañana en que tenían programada una cesárea para tener a sus trillizos. Aparentemente, Yésica Cuevas estaba en la casa de su expareja.
Este hombre sería el padre de una de las hijas de Cuevas y fue él quién le avisó a las autoridades que la mujer estaba en su casa, en Berazategui, a apenas unas cuadras del domicilio de la mujer. Efectivos policiales se acercaron al lugar poco después del mediodía y la encontraron en "buen estado de salud".
La mujer fue trasladada a una seccional de la policía para ser analizada por el cuerpo médico, que debe constatar que no tenga lesiones. Desde la fiscalía a cargo del caso sospechan que Cuevas se habría ido de su casa por sus propios medios.
Cuevas desapareció el 29 de enero al mediodía. Ella le había hecho creer a su familia que estaba embarazada de trillizo y que ese día tenía programada una cesárea en el Hospital Evita Pueblo. Antes de ir al hospital, la mujer dijo que tenía que pasar por una farmacia para comprar algunas cosas para su tiempo de internación. Unos minutos después, sus familiares se dieron cuenta que no volvía y salieron a buscarla.
En verdad, ella nunca había estado embarazada. Incluso, según contó un médico del Hospital Evita Pueblo, la mujer intentó convencerlo para que le entregue un certificado de embarazo falso. Aunque ella le ofreció dinero, él no aceptó su pedido.