Lionel Messi, flamante ganador del premio The Best de la FIFA, jugó un tiempo en su primer partido del año con el Inter Miami, en lo que fue empate sin goles ante la selección de El Salvador. El mejor jugador del mundo mostró anoche pinceladas de su talento y casi mete un golazo como los que hacía en Barcelona junto a Luis Suárez, Sergio Busquets y Jordi Alba, pero se fue preocupado por la lesión de Facundo Farías.
Durante el amistoso que estuvo marcado por una expectativa muy alta de los salvadoreños, el campeón del mundo dejó destellos de por qué fue elegido el mejor jugador de fútbol por el premio de la FIFA. La Pulga tuvo un mano a mano ante el arquero Mario González en los minutos finales y después asistió con mucha lucidez a Alba, en la segunda ocasión más peligrosa para los dirigidos por Gerardo Tata Martino.
Pese al 0 a 0, Messi fue la gran atracción del encuentro, con muestras de cariño en las tribunas, donde se pudieron ver camisetas del Inter Miami y de la Selección Argentina. Es más, en la previa, el astro argentino saludó al exjugador salvadoreño Jorge Mágico González, uno de los más talentosos futbolistas que recibió elogios del propio Diego Armando Maradona.
Con este partido, donde se reencontró en cancha con su viejo amigo Luis Suárez, el capitán de la Selección Argentina retornó a la actividad futbolista tras sesenta días. Su última actividad oficial fue la histórica victoria 1 a 0 de la Scaloneta contra Brasil en el mítico estadio Maracaná de Río de Janeiro por las Eliminatorias Sudamericanas.
Sin embargo, no todo fue positivo en el amistoso de Inter Miami. En el segundo tiempo, ingresó el exdelantero de Colón de Santa Fe, Facundo Farías, pero dejó la cancha en camilla a los 30 minutos por una molestia en la rodilla izquierda, mientras Messi observaba con preocupación.
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