Milei designó a un alto ejecutivo de IRSA, la empresa propietaria del Hotel Libertador, a cargo de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE). Se trata de Nicolás Pakgojz, quien también se desempeñó como funcionario de Larreta durante su gobierno en la Ciudad.
Desde la campaña electoral, Milei se hospeda en dicho hotel y disfruta de sus servicios sin incurrir en gastos de hospedaje. El financiamiento de su alojamiento no se realiza directamente, ya que no hay registros de gastos oficiales.
El dueño del Hotel Libertador y el Grupo IRSA es Eduardo Elsztain, quien apoyó a Milei durante la campaña electoral y fue un empresario afín a Macri durante su mandato presidencial entre 2015 y 2019. Se sospecha que Elsztain recibe beneficios considerables a cambio de proporcionar alojamiento a Milei.
En ese sentido, muchos denunciaron que la derogación de la Ley de Alquileres era una medida ajustada a los intereses del empresario, ya que el Grupo IRSA se dedica a operaciones inmobiliarias de alta gama. Además del Hotel Libertador, el grupo empresarial posee el lujoso hotel Llao Llao de Bariloche, así como los shoppings Abasto y Alto Palermo.
Curiosamente, ahora un ejecutivo suyo se encargará de gestionar la Agencia de Administración de Bienes del Estado. Se trata de un ente creado durante la segunda presidencia de Cristina Kirchner, que se encarga del control permanente de la actividad inmobiliaria estatal y la intervención en toda operación inmobiliaria de la totalidad de las jurisdicciones y entidades que conforman el sector público.
Otras polémicas designaciones
El ingreso de Franco Mogetta a la Secretaría de Transporte, quien ya desempeñaba la misma función en el gobierno de la provincia de Córdoba, trae alertas y preocupación en los espacios de La Libertad Avanza, el PRO y en las cámaras del sector.
Cuentan que detrás del armado de esta Secretaría, se encuentra moviendo los hilos Gabriel Bermúdez, exfuncionario de Transporte durante la gestión de Mario Meoni. El mismo fue echado por corrupción y por privilegiar con subsidios a determinadas empresas. Lo acompañan en el equipo Ignacio Olocco y Hernán Nacuzzi, este último también echado de CNRT por fiscalizaciones sospechosas. Todos serían investigados por la justicia. Más allá de las internas, el ministro Ferraro deberá seleccionar funcionarios cuyos antecedentes no sean dudosos.
De la misma provincia que Mogetta es Daniel Tillard. El cordobés fue elegido para dirigir el Banco Nación. Durante ocho años fue el titular de Bancor, propiedad de la Provincia de Córdoba. Es el tercer nombre que integra el gabinete del gobernador Juan Schiaretti que se suma a la Nación.
Ni bien asumió, Tillard mostró las intenciones de privatizar el BNA: “La transformación del Banco Nación en Sociedad Anónima es central para crecer, alcanzar eficiencia y mejorar la transparencia en la gestión”, escribió en su cuenta de X.
Por su parte, y pese a toda la polémica que se levantó, el Procurador del Tesoro designado fue Rodolfo Barra, exministro de Justicia durante la presidencia de Carlos Menem. Pero lo verdaderamente cuestionable de su historial es su pertenencia, durante su juventud, al grupo Tacuara, organización política fascista y neonazi.
Pese a tener una posición ultranacionalista y definitivamente nazi, Barra fue parte de la Unión Nacionalista de Estudiantes Secundarios, organización política juvenil ligada al Movimiento Nacionalista Tacuara. Barra fue funcionario menemista entre 1993 y 1996 hasta que tuvo que renunciar luego de que la revista Noticias diera a conocer su historia nazi con material fotográfico donde se lo ve haciendo el saludo romano con una esvástica de fondo.
“Si fui nazi, me arrepiento”, dijo en su momento al dejar la función pública. Lo concreto es que ahora vuelve a pertenecer al gobierno, en un contexto donde Milei se acerca a la comunidad judía.
