Poco después de conocerse el anuncio de Luis Caputo sobre las primeras medidas económicas a implementarse en el gobierno de Javier Milei, el Fondo Monetario Internacional emitió desde Washington una “declaración de la portavoz del FMI sobre Argentina” en la que apoya todas las líneas de acción anunciadas calificándolas de “audaces”.
En la declaración, firmada por Julie Kozack, el FMI afirmó que “acoge con agrado las medidas anunciadas hoy por el nuevo Ministro de Economía de Argentina, Luis Caputo”. Asimismo, consideraron que “estas audaces acciones” mejorarán “significativamente” nuestras finanzas públicas a la vez que, supuestamente, protegerán “a los más vulnerables de la sociedad”.
“Su implementación decisiva ayudará a estabilizar la economía y sentará las bases para un crecimiento más sostenible y liderado por el sector privado”, se lee a continuación. Sobre el final, desde el organismo expresaron que su propio personal y “las nuevas autoridades argentinas trabajarán rápidamente en el próximo período”.
Y concluyeron: “Luego de serios reveses políticos en los últimos meses, este nuevo paquete proporciona una buena base para futuras discusiones, para volver a encarrilar el programa existente respaldado por el Fondo”.
En la misma línea, la directora del FMI, Kristalina Georgieva, se mostró a gusto con el paquete de medidas anunciado por Caputo desde su propia cuenta de Twitter. "Acojo con beneplácito las medidas decisivas anunciadas hoy por el Presidente Javier Milei y su equipo económico para abordar los importantes desafíos económicos de Argentina: un paso importante hacia el restablecimiento de la estabilidad y la reconstrucción del potencial económico del país", escribió.
La serie de decisiones políticas anunciadas ayer por Caputo consisten, a grandes rasgos, en un plan de ajuste y mayor devaluación que se reflejará, entre otras cosas, en un aumento de los precios y las tarifas. En concreto, reducirán los ministerios y secretarías así como los aportes del Tesoro a las provincias, suspenderán las licitaciones de obra pública, reducirán el subsidio a la energía y al transporte y el dólar oficial pasa a valer $800.
