Luego del debate presidencial entre Sergio Massa y Javier Milei, Mauricio Macri conversó dos veces con el candidato de La Libertad Avanza. El expresidente, que está en Santiago de Chile desde el miércoles pasado, y tenía planeado su regreso a Argentina para este lunes, le quitó importancia al debate y centró la conversación con Milei en el operativo de fiscalización en conjunto entre el PRO y La Libertad Avanza.
Esta semana, Macri planea subirse más claramente a la disputa electoral y salir a hacer campaña por Milei para evitar que el kirchnerismo siga en el poder. Además, intensificará su presencia en la campaña de Andrés Ibarra para ser presidente de Boca Juniors, en cuya lista Macri figura como vicepresidente.
Desde el sector del PRO que se alineó a Milei destacan que el candidato no se haya alterado en el debate, como le había recomendado Macri. Sin embargo, según informó Infobae, admiten que "perdió varias oportunidades" para hablar sobre la gestión económica de Massa y "los escándalos de corrupción y de espionaje ilegal" que dejaron en evidencia al gobierno nacional y a varios protagonistas de Unión por la Patria.
Además, desde el sector del expresidente afirmaron que la ausencia total de dirigentes del PRO en el debate no se debió a cortocircuitos ni a diferencias sino que ya estaba previsto. Añadieron: "Hasta ahora tampoco se habló de que vayamos el día del balotaje al búnker de La Libertad Avanza".
Aparentemente, Macri también le aseguró a Milei que ya consiguió los fondos que necesita para financiar la red de fiscales necesaria para controlar los votos en casi todas las mesas del país. Aún así, hay desencuentros fuertes entre los equipos del PRO y La Libertad Avanza, sobre todo por la falta de experiencia de la militancia de Milei para organizar la inmensa red de fiscales necesaria para controlar correctamente una elección. Desde LLA, por su parte, temen que la creciente influencia del macrismo en el entorno de Milei termine dejando en un papel secundario a los libertarios originales.
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