La entraña es un corte que queda bien de mil maneras: a la fugazzeta, en guiso, al horno, a la parrilla. Como no falla nunca, es un gran comodín para sorprender a tus invitados o para darle un gusto a tu paladar el fin de semana.
Se trata de una pieza deliciosa, con una excelente relación precio-calidad. Para los asados, se elige la entraña fina, que es más blanda y menos tendinosa que la gruesa. Además, este corte, de forma delgada y alargada, se cocina muy rápido, por lo que es ideal para solucionar rápidamente la cena.
Pero hacerla a la parrilla con limón, chimichurri y como parte de un asado, no es la única manera de hacerla. Con un poco de creatividad, la podés hacer a la fugazzeta y te queda de diez.
¿Cómo preparar la mejor entraña a la fugazzeta?
La entraña a la fugazzeta es un plato sumamente fácil de preparar. En menos de una hora vas a tener una comida deliciosa, realizada en pocos pasos. Para cocinarla vas a necesitar:
- 1 kg de entraña
- 2 cebollas medianas
- 200 g de queso cremoso
- 100 g de queso en hebras
- Pimentón
- Orégano
- Sal
- Pimienta
El procedimiento es sencillo y tiene algunos secretos para lograr la mejor versión del plato. Para cocinar la mejor entraña a la fugazzeta tenés que:
- Salpimentar la entraña. Si querés que quede más sabrosa la carne, podés marinarla durante unos minutos en una mezcla de aceite de oliva, ajo, orégano y sal durante unas horas.
- Cocinar en la parrilla de ambos lados, hasta que esté dorada y jugosa.
- Mientras se cocina, caramelizar las cebollas hasta que estén doradas.
- Una vez que la carne esté hecha, poner por encima el queso cremoso. Dejar que se derrita un poco antes de continuar con la preparación.
- Agregar las cebollas caramelizadas, asegurándote de distribuirlas de forma uniforme por toda la pieza.
- Espolvorear con queso en hebras y llevar al fuego hasta que todo se derrita. Añadir pimentón y orégano por encima.
- Servir caliente, acompañado por puré o papas fritas.