La División Antidrogas de Rosario de la Policía Federal arrestó nuevamente a Julieta Isabel Valenzuela, que había sido liberada el 28 de junio, trece días después de su primer arresto por tráfico de pastillas.
A la mujer se la acusa de narcotráfico por su participación en la banda de su exnovio Emiliano Tisera, alias “Emi Trix”, el mayor dealer de drogas sintéticas de Rosario, que utilizaba a policías como vendedores y custodios.
Dedicada a la manicuría, Valenzuela era una celebridad en Instagram, donde compartía fotos a bordo de motos jet ski en el río local, o en fiestas electrónicas donde bailaba hasta el amanecer, y compartía rutinas de fitness para casi 13 mil seguidores.
La causa comenzó gracias a un delator que acusó a Tisera, exempleado de una droguería, de viajar a CABA cada 15 o 20 días para traer “pastillas de éxtasis y otras drogas o el polvo, ya que tendría una máquina para la fabricación de comprimidos a la que cambia de lugar cada tanto en departamentos que alquila en Funes o Roldán”.
Las fiestas electrónicas rosarinas eran su espacio de comercialización y allí su exnovia jugaba un papel central. Allí confluían jóvenes de todo el interior para disfrutar de sets de célebres DJs, eran su territorio.
En la causa, el policía Nicolás Balzi, de la fuerza santafesina, fue detenido y acusado de ser el dealer de “Emi Trix”. En el operativo, le encontraron su pistola Bersa reglamentaria, su juego de esposas, su credencial de la fuerza y 32 mil pesos, además de treinta pastillas de éxtasis, 40 gramos de cogollos de porro, 18 gramos de cristal de MDMA, dos plantas de marihuana y dos planchas de 25 troqueles cada una de LSD.
En el domicilio de Tisera, en tanto, se encontraron 600 mil pesos, algunas flores de marihuana y una pistola Browning 9 milímetros con tres balas.
También se allanó un departamento en la calle San Lorenzo que Tisera y Valenzuela, supuestamente, usaban de depósito: allí se encontraron más de 2 mil pastillas y 130 gramos de cristal, además de una balanza digital.
