La Corte Suprema de Justicia rechazó los planteos de recusación que había presentado la defensa de Cristina Kirchner y otros ex funcionarios de su gobierno contra los jueces de Comodoro Py que intervinieron en las causas en las que están imputados.
Los planteos iban contra los jueces Martín Irurzun, Mariano Llorens, Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi (todos ellos de la Cámara Federal), el juez Juan Carlos Gemignani (de Casación) y el fallecido juez Claudio Bonadio.
Los cuestionamientos de los abogados de la vicepresidenta ya habían sido desestimados en instancias anteriores pero, a través de sucesivas apelaciones, llegaron finalmente a la máxima instancia, donde todos los planteos se declararon inadmisibles con diversos argumentos. Las resoluciones llevan la firma de Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti, los cuatro jueces de la Corte.
La Corte comenzó por rechazar la recusación de los jueces Irurzun y Llorens, de la Sala II de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional. Los dos habían votado por hacer lugar, el 31 de agosto del 2018, a un pedido de la Unidad de Información Financiera, y dispusieron que se convoque a la vicepresidenta a prestar declaración indagatoria. El máximo tribunal también resolvió la apelación presentado por las defensas de Cristina Kirchner y el senador Oscar Parrilli pidiendo por el apartamiento del juez Gemigniani por no haber cumplido con el reglamento correspondiente aprobado por la Acordada 4/2007 del tribunal. El caso de Bonadio es el más sencillo: la muerte del exjuez había "vuelto abstracta" la cuestión de su recusación.
