El índice de Confianza de los productores agropecuarios, medido por el Ag Barometer Austral de la Universidad Austral, muestra en su edición de mayo una importante mejora con respecto a marzo, pasando de 84 puntos y dejando atrás los 69, es decir, un aumento del 21%.
"Esta suba se basa exclusivamente en el índice de Expectativas Futuras que alcanza un valor de 120 y es de los más altos de la serie", informaron desde la Universidad.
Cabe destacar que no se daba un índice por encima de 100 desde el mes de julio 2019, previo a las PASO de ese año.
Como contrapartida, el índice de Condiciones Presentes presenta un deterioro con relación a la medición de marzo pasado (31 vs 35), que se acentúa si se lo compara con la situación de un año atrás (31 vs 97).
"El clima y la incertidumbre política representan los mayores desafíos y preocupaciones para los próximos 12 meses, seguidos muy de cerca por la no disponibilidad de financiamiento y las altas tasas de interés", advirtieron.
Productores mirando el horizonte
Con relación a los próximos 12 meses, hay una mejoría importante en las expectativas de la situación financiera de los productores (167 vs 93 de marzo) dando a entender que lo peor ya ha pasado y se encamina una vuelta a la normalidad.
"Un 74% de los productores piensan que su situación va a ser mejor que la actual con un valor de 167, número que representa una substancial mejora con relación a marzo 2023 (93), en gran parte apoyados en las favorables condiciones climáticas que se prevé para la campaña de trigo 2023/24 con estimaciones de una producción de 16 millones de toneladas, un 40% por encima de la magra cosecha 2022/23", detalla el informe.
El clima (52%) y la incertidumbre política (48%) constituyen los principales desafíos/preocupaciones para los próximos 12 meses, seguidos muy de cerca por la falta de financiamiento (40%) y las altas tasas de interés (19%).
Por último, un 71% de los productores manifiestan que van a mantener los mismos niveles de tecnología que en campañas anteriores, aunque un 18% va a bajar la intensidad de producción.