La Inspección General de Justicia emitió un contundente comunicado sobre la colecta que organiza Santi Maratea para Independiente, y declaró como ineficaz e irregular dicho fideicomiso. El plan económico para ayudar al Rojo comenzó el 27 de abril, y a más de un mes de su inicio, sumado a la resolución del IGJ, se desconoce lo que sucederá en el futuro.
Además, encomendaron al Departamento de Asuntos Judiciales a nombrar a un interventor informante y controlador. El abogado del fideicomiso, Claudio Levy, habló de los puntos polémicos del contrato. El letrado explicó que la firma del acuerdo se realizó en Neuquén porque es una jurisdicción muy amable a los efectos de los trámites administrativos.
Levy enfatizó que el contrato es mucho más simple de lo que parece. “El fiduciante es Pepe Santoro, que aportó $32 mil para los gastos de constitución del fideicomiso, que se puso en funcionamiento con la existencia de un patrimonio afectación directo que es ese monto. En tanto, el fiduciario es Maratea”, detalló.
“Es el grupo de Santi Maratea el que decide no hacerlo por ahora y le pone una mística al tema. Es una decisión que a mí me excede”, indicó el abogado respecto al por qué no se da a conocer públicamente el contrato de creación del fideicomiso. Sin embargo, Levy dijo que el dinero recaudado no se entregará directamente a Independiente porque no es parte del contrato del fideicomiso.
El letrado explicó que el club está sujeto a un cúmulo de deudas y existe el riesgo de que la recaudación de esta donación quede en Independiente y no cumpla con la finalidad del fideicomiso. “Por eso es imperioso aislar esos activos. Por el momento estamos revisando qué mecanismo de pago podría utilizar el fideicomiso para abonar las deudas que tiene la institución con sus acreedores”, sentenció.
El escrache de los excompañeros del colegio a Santi Maratea
Los excompañeros del colegio acusaron a Santi Maratea de robar plata. Sofía compartía curso con el influencer, y explicó que siempre que faltaba dinero era porque se lo guardaba él. “Cuando empezó a faltar plata a todos nos dio por las pelotas. Éramos un grupo de 25 personas, un día marcamos un billete y lo dejamos adentro de una bolsa. Cuando volvimos del recreo el billete no estaba, y cuando revisamos estaba en su billetera”, recordó.
Increíblemente, la respuesta de Santi Maratea fue:la siguiente: “Si bien era un colegio que se involucraba en los problemas que tenía cada uno, yo no iba a pedirles ayuda porque mi personalidad es que yo no necesito que nadie lo haga. Todos arderán fuego, esa era mi mentalidad en ese momento”.
