Roger Waters vuelve a ser noticia tras un concierto que dio en Berlín la semana pasada. El músico es investigado por la policía alemana por "incitación al odio", dado que durante el show vistió un traje militar de estilo neonazi cuyo origen se puede rastrear hasta las presentaciones en vivo del álbum The Wall.
El pasado 17 de mayo Roger Waters se presentó en Berlín con el traje "neonazi" que él y sus compañeros ya habían exhibido durante sus conciertos vinculados con The Wall y en la película de 1982 que lleva el mismo nombre. El cofundador de Pink Floyd vistió un abrigo negro con un brazalete rojo que llevaba dos martillos cruzados, símbolo emblemático de la película. Además, tenía lentes de sol y un arma ficticia.
"La ropa lucida en escena es susceptible de exaltar o justificar al régimen nacionalsocialista y alterar el orden público. El atuendo se parece al de un oficial de las SS", argumentó Martin Halweg, portavoz de la policía de Berlín, en diálogo con AFP. "Estamos investigando y una vez termine el procedimiento, lo transmitiremos al Ministerio Público para una última evaluación jurídica", añadió, y explicó que la fiscalía decidirá si abre o no un proceso judicial.
La exhibición de Waters no sólo alertó a la policía berlinesa sino que, además, ofendió a la comunidad israelí, en el marco de una serie de tensiones previas por el abierto apoyo del músico a Palestina en el conflicto con Israel. Durante el show, Waters proyectó en una pantalla los nombres de Anna Frank y de Shireen Abu Akleh, la periodista palestino-estadounidense del canal Al Jazeera asesinada por las fuerzas israelíes hace un año.
En respuesta, la cancillería de Israel le reprochó a Roger Waters "haber ensuciado la memoria de Anna Frank y de seis millones de judíos asesinados durante el Holocausto". Por su parte, el embajador del país ante la ONU, Danny Danon, escribió en Twitter que el ex Pink Floyd "quiere comparar a Israel con los nazis" y que es "uno de los mayores detractores de los judíos de nuestra época".
Los elementos de mi performance que han sido cuestionados son claramente una declaración en oposición al fascismo, la injusticia y el fanatismo en todas sus formas.
Roger Waters
También como parte de la oleada de reacciones, las autoridades de Frankfurt cancelaron el concierto que el artista tenía programado para este domingo pero, según comunicó la agencia Télam, la decisión fue anulada por un tribunal que interpretó que la medida vulneraba la libertad de expresión.
El origen del traje y el descargo de Roger Waters
El traje es parte de la iconografía creada por Roger Waters y el ilustrador Gerald Scarfe para The Wall, el emblemático álbum conceptual de Pink Floyd que recorre la historia de una estrella de rock ficticia que se encierra entre muros imaginarios ante la crueldad y la violencia social imperantes. La estética de la obra está inspirada, precisamente, en el nazismo, de donde sus creadores tomaron los trajes militares y los ejércitos animados de martillos rojos y negros marchando que se ven en la película.
En concreto, estos elementos aparecen cuando el protagonista, al borde de la locura, alucina que se transforma en un dictador fascista. En general, tanto el disco como la película fueron consideradas obras críticas de los regímenes violentos y su estética está presente desde hace años en las presentaciones del álbum en vivo.
En las últimas horas, Waters publicó un descargo en su cuenta de Twitter, donde escribió que su presentación "atrajo ataques de mala fe de quienes quieren mancharme y silenciarme porque están en desacuerdo con mi visión política y mis principios morales".
"Los elementos de mi performance que han sido cuestionados son claramente una declaración en oposición al fascismo, la injusticia y el fanatismo en todas sus formas", agregó el músico, y continuó: "Los intentos por enmarcar esos elementos como algo distinto son falsos y están motivados políticamente".
Asimismo, recalcó que la "caracterización de un desquiciado fascista y demagogo" fue una "marca" de sus shows desde The Wall en 1980 y que su familia siempre combatió al nazismo. "A pesar de las consecuencias de los ataques contra mí, seguiré condenando la injusticia y a todos aquellos que la lleven a cabo", concluyó.