Condenaron a un hombre de 48 años por abusar sexualmente de las hijas de su pareja en reiteradas ocasiones "mediando violencia e intimidación". Durante ese período, una de las víctimas quedó embarazada y tuvo que abortar. Los cargos fueron enmarcados en la ley de violencia de género y el juez Andrés Olié dictó la sentencia de 13 años de cárcel para el acusado.
El hecho ocurrió en La Pampa. Durante el juicio oral, pudo probarse que el hombre es culpable de abusar sexualmente de una de las hijas de su pareja durante cuatro años y de la otra durante once, hasta octubre de 2021. Las víctimas sufrieron estas agresiones en reiteradas oportunidades y en las dos casas donde vivieron como familia.
Al padrastro de las dos víctimas, la justicia lo declaró culpable del delito de abuso sexual con acceso carnal, mediando violencia y amenaza, agravado por haber sido ejecutado contra una persona que se encontraba bajo su guarda. Una de las víctimas tiene 13 años.
Durante los alegatos, el fiscal Marcos Sacco pidió la pena de 14 años de prisión contra el acusado. Sin embargo, su defensora solicitó una pena más leve. Sus argumentos son que admitió su responsabilidad, no tiene antecedentes penales y tiene dos hijos menores de edad.
Por su parte, el juez dijo que "los agravios sexuales no solo fueron escalando en intensidad, sino que se mantuvieron por largos años". Y agregó que "se trató de hechos múltiples, la extensión del daño causado –los trastornos físicos, psíquicos, psicológicos y anímicos que sufrieron las víctimas– y el carácter crónico y progresivo de los ataques sexuales". Aunque avaló como atenuantes los argumentos de la abogada defensora.
Antes de comunicar su decisión, el juez remarcó que la menor "debió transitar un procedimiento de interrupción del embarazo, causado a partir de los abusos sexuales padecidos" y que "la intervención realizada muy posiblemente tendrá también consecuencias físicas en ella al momento de maternar, si ese fuera su deseo en el futuro".
Si sos víctima de violencia familiar o sexual, o sabés de alguien que lo sea, llamá a la línea 137. Es gratuita, nacional y brinda contención, asistencia y acompañamiento las 24 horas, los 365 días del año.
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