Jonathan Luna, quien asesinó a Micaela Ortega en 2016, le pidió a la justicia que lo trasladen a una cárcel de mujeres. Asegura que está cambiando de género, ahora se autopercibe mujer y se llama Joana. Además, pidió que le devuelvan su celular y dice que "la está pasando mal".
Fuentes judiciales aseguran que desde hace un tiempo viene presentando escritos formales con este pedido. Por su parte, los abogados de Luna aseguran que intentarán sostener ante la Justicia que el crimen no se trató de un femicidio, sino de un homicidio simple por el hecho de autopercibirse mujer.
Por su parte, Mónica Cid, la mamá de Micaela, se mostró indignada, ya que asegura que se enteró por los medios sobre esta situación. “La Ley de Víctimas para nosotras parece que no existe”, dijo en diálogo con el programa Hora Pico. “Él sabe muy bien que yo lo voy a seguir siempre, él mató a una nena, a una mujer. No puede estar cerca de otras mujeres y mucho menos con un celular, porque él mata a través de la telefonía”, continuó.
Luna, que permanece cumpliendo condena en la cárcel de Florencio Valera, solicitó además que le devuelvan su celular. Asegura que "la está pasando mal" en prisión. El asesino fue condenado a prisión perpetua en 2017 en un juicio histórico: el primer caso de grooming seguido de muerte en Argentina.
Sin embargo, no es el primer condenado que alega cambio de género por distintas estrategias de defensa. Este mismo año, durante su juicio, Fernando Alves Ferreira -imputado por el femicidio de Eduarda Santos de Almeida, en Bariloche- también aseguró autopercibirse mujer. Por tanto, su abogado solicitó el cambio de carátula del caso alegando que "Fernando se autopercibe Amanda" y que “un femicidio solo lo puede cometer un hombre”.
El caso de Micaela Ortega
Jonathan Luna engañó a Micaela Ortega a través de redes sociales. La adolescente tenía 12 años cuando el 23 de abril de 2016 salió de su casa en Bahía Blanca para encontrarse con "una amiga" que había conocido por Facebook. Esa "amiga", en realidad era un perfil falso utilizado por Luna para contactar con chicas adolescentes y engañarlas.
Un mes después, luego de la confesión del asesino, encontraron el cuerpo de Micaela. Fue él mismo quien indicó dónde lo había escondido.
Luna recibió la condena de prisión perpetua en octubre de 2017 y el juicio fue histórico: Es el primer condenado por un caso de grooming seguido de muerte en Argentina.