Tras el fallecimiento de María Kodama, la obra de Jorge Luis Borges podría pasar a manos del Estado de la Ciudad de Buenos Aires, ya que no encuentran su testamento y tampoco existen herederos. Ahora, los sobrinos de la albacea del escritor se presentaron ante la Justicia para reclamar la herencia.

Ayer, el abogado de Kodama anunció en conferencia de prensa que, si bien la viuda de Borges tenía todo arreglado sobre la herencia, no podían encontrar el testamento, por lo que la justicia debía determinar a quién le pertenece su legado. Hoy, los sobrinos se presentaron en calidad de herederos ante el Juzgado Civil 94 y solicitaron realizar un inventario y secuestrar obras literarias, premios y condecoraciones, manuscritos, fotos, material periodístico y títulos de propiedad de valor literario e histórico.

Fernando Soto, apoderado de Kodama durante años, declaró estar aliviado por la aparición de Mariana del Socorro, Martín, Nicolás y María Belén Kodama, hijos de Jorge Kodama, el difunto hermano de María. Soto fue el encargado de iniciar el juicio por la sucesión antes de que los derechos de autos pasen a manos del Estado.

El apoderado aclaró que los sobrinos "son los responsables de pedir la protección de esos bienes". Y agregó: "Que se hayan presentado como herederos abre una nueva etapa en el expediente sucesorio".