Luego de la muerte de Hebe de Bonafini, la titular de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, el periodista Alejandro Bercovich le dedicó su espacio editorial dos días seguidos. Afirmó: "Si hubiera que reducir a Hebe a una parte de su cuerpo, no sería ni el cerebro, ni el corazón, ni la lengua, aunque los usó hasta exprimirlos: Hebe lo que fue toda su vida fue puro ovario". El periodistas explicó: "Vamos a recorrer su vida como símbolo de algo que se está revalorizando, símbolo del dolor más profundo que alguien puede sentir, la desgracia de un ama de casa de Ensenada a la que le secuestran dos hijos y una nuera".

Ella, entonces, se tomó el tren hacia la Plaza de Mayo, para dar vueltas a la Pirámide de Mayo para exigir la aparición con vida de los desaparecidos, mientras los medios "ni se animaban a contar que miles de personas faltaban de su casa, y seguían cubriendo falsos enfrentamientos".

El periodista planteó que de los ovarios de Hebe, y los de sus compañeras, "nació nuestra democracia, nacieron los juicios a las juntas". "Imaginate, si había miedo en el 85', lo que 1977, cuando las Madres comenzaron a marchar".

La verdad que lo que se vio en el 77, en el 2001, en los 90, son los ovarios de las madres, del pueblo, lo que velamos son esos ovarios, con Hebe se fueron esos ovarios, los ovarios de todo un país, los de Hebe de Bonafini.

Luego, Bercovich hizo un recorrido por la historia de Hebe en democracia. Recordó que durante los juicios a los militares, ella se paraba frente a Tribunales con un megáfono y repetía los nombres de los 1000 represores que ya se conocían. Además, contó que en los años 90' ella organizaba las "Marchas de la Resistencia", y las Madres se negaban a sumarse a la frivolidad de la época, al fin de la historia, a la justicia y la transformación social.

El periodista recordó otro momento histórico en que "los ovarios de Hebe" se hicieron notar: el 19 y 20 de diciembre del 2001. Ella fue a la plaza y se enfrentó, físicamente, a la policía, exigiendo hablar con el comisario a cargo de la represión y saber a dónde se estaban llevando a los detenidos.

"La verdad que lo que se vio en el 77, en el 2001, en los 90, son los ovarios de las madres, del pueblo, lo que velamos son esos ovarios, con Hebe se fueron esos ovarios, los ovarios de todo un país, los de Hebe de Bonafini", concluyó Bercovich.