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Ambiente

Una muy extraña serpiente murió al atragantarse con un ciempiés

Una de las serpientes de la especie coronada de roca, en peligro de extinción en el mundo, murió al intentar comerse un ciempiés: se atragantó ingiriendo el insecto y ahora solo quedan 25 especímenes en el mundo.

Esta especie, que es considerada la más rara de América del Norte, es bastante pequeña. Suele vivir bajo tierra, esconderse en gritas o debajo de rocas y la mayoría de las que quedan en el mundo viven al sur de Florida.

Desde 2018 que nadie veía una de ellas viva o muerta, pero un visitante del Parque Estatal de Arrecifes de Coral encontró el cadáver en uno de los senderos en Cayo Largo. La serpiente se encontraba congelada por lo que se pudo conocer que se había atragantado al querer comer un ciempiés gigante.

"Me quedé asombrado cuando vi las fotos por primera vez -dice Coleman Sheehy, gerente de la colección de herpetología del Museo de Florida- Es extremadamente raro encontrar especímenes que mueran mientras comían presas, y dado lo rara que es esta especie, nunca hubiera predicho encontrar algo como esto. Todos estábamos totalmente atónitos".

Esta serpiente medía un poco más de 20 centímetros de largo y solo logró que unos 50 milímetros pasaran por su garganta antes de morir ahogada. Aún restaban otros 23 milímetros de ciempiés, todo esto fue descubierto gracias a una autopsia digital que permitió examinarla sin llegar a utilizar el bisturí.

La tráquea del depredador estaba pellizcada donde se ensanchaba el insecto y eso fue lo que produjo que el aire dejara de poder pasar. Aunque los investigadores pensaban que también podría haberse tratada de envenenamiento ya el ciempiés tenía unas pinzas venenosas, pero la víbora probablemente había desarrollado cierto nivel de resistencia al veneno de su presa.

"No podemos decir con certeza si todavía están presentes o no en la península de Florida. La ausencia de evidencia no es evidencia de ausencia, pero su hábitat básicamente ha sido destruido", lamentó Sheehy.