Un hombre, acusado por la justicia en otra causa, decidió declarar frente al fiscal Dante Vega la semana pasada, y reactivó el llamado Bentogate. Esta megacausa investiga al juez federal de Mendoza Walter Bento, quien está acusado de ser el líder de una banda que cobraba coimas a contrabandistas para aliviar la situación judicial de algunos presos.
Los datos que entregó el arrepentido eran exactos, y contribuían a confirmar la hipótesis de la causa: que el juez Bento recibía coimas a cambio de dar beneficios judiciales.
El nuevo arrepentido presentó testimonios sobre algunas de las actividades ilegales que se realizaban en juzgado de Bento. A partir de recibir las declaraciones del nuevo testigo, los investigadores comenzaron a revisas los expedientes que se tramitaron durante los últimos años en el juzgado de Bento. Los datos que entregó el arrepentido eran exactos, y contribuían a confirmar la hipótesis de la causa: que el juez Bento recibía coimas a cambio de dar beneficios judiciales. Esto lo realizaba junto a un equipo de abogados y facilitadores, quienes se encargaban del contacto directo con los acusados. Los nuevos descubrimientos podrían llevar a más imputaciones, declaraciones, y detenciones.
A partir de la detención de Walter Bardinella Donoso, y el secuestro y análisis de su celular, comenzó una megacausa con más de 20 procesados.
La causa empezó en marzo del año pasado. A partir de la detención de Walter Bardinella Donoso, y el secuestro y análisis de su celular, comenzó una megacausa con más de 20 procesados. Todos ellos están vinculados a la justicia, y varios tienen prisión preventiva, para evitar su influencia sobre la causa o su fuga.
El juez Bento está acusado en nueve causas por cimas. Además, en la causa hay abogados, policías, e individuos acusados de contrabando. Mientras se desarrolla la investigación, se encuentran en prisión domiciliaria los abogados Luciano Ortego y Jaime Alba, además del comisario Gabriel Moschetti.
El Bentogate
El 6 de mayo del 2021, la investigación tuvo sus primeros frutos judiciales. Aquél día, se oficializó la imputación de Walter Bento por asociación ilícita, enriquecimiento ilícito y lavado de activos de origen delictivo. Además, la causa incluyó a su esposa, Isabel Boiza, quien ayudaba a lavar el dinero a través de la compra y venta de inmuebles. La causa está a cargo del juez Eduardo Puigdéndolas y el fiscal Dante Vega.
Entre los imputados hay abogados, policías especializados en combatir el narcotráfico, contrabandistas, empleados de aduana, informantes de la policía, funcionarios judiciales y personas imputadas o condenadas. Todos ellos conformaban una impresionante red. Buscaban casos en los que intervenía Bento, y cobraban coimas para asegurar la libertad, o penas menores a las correspondientes, a criminales asociados al contrabando. Por el momento, el juez Bento se encuentra libre, ya que tiene fueros por su posición.