Javier Smaldone, programador y técnico informático, habló en No Dejes Para Mañana sobre la persecución que vivió tras alertar una filtración masiva de información de la Policía Federal en 2019.
"Esta causa lo que mostró es que hay una seguidilla de hechos, desde principios de 2017 hasta agosto de 2019 que fueron cometidos por la misma persona o el mismo grupo de personas", comenzó Smaldone. Lo que sucedió en 2017 fue que a Patricia Bullrich le había llegado un mail, y al ingresar a un link le robaron información personal. "Ahí salen a buscar perejiles, detienen a tres personas, y mientras estaban detenidas, quien se adjudicaba ese hecho además accede a cuentas de la Policía Federal", prosiguió el técnico informático.
"Dos meses después se despacharon con quince allanamientos y seis detenciones en cuatro provincias, y ahí caí yo. Se juntaron cuatro cajas con mas de medio metro de altura de equipos informáticos que estuvieron durmiendo mas de dos años en Comodoro Py. Ni los peritaron", aseguró Smaldone, quien quedó en el ojo de la tormenta tras unos simples tuits donde alertaba sobre la situación.
No es nada agradable que muchos policías federales consideren que yo los puse en peligro y que me metí con sus familias. Esa es la situación n la que estuve mas de dos años", contó Smaldone.
En este sentido, el programador contó que "muchos medios tomaron la versión oficial de la policía, y pusieron una foto mía con mi hija, me presentaron en todos lados como el principal sospechoso de una banda". "No es nada agradable que muchos policías federales consideren que yo los puse en peligro y que me metí con sus familias. Esa es la situación n la que estuve mas de dos años. Recibí amenazas de muerte, adjuntándome fotos del DNI y la partida de nacimiento de mi hija, de todo. Las denuncie pero nunca me llamaron. Espero que ahora esto se termine", relató.
"Creo que la policía sabia a quienes estaban metiendo y por qué. Por un lado desarrollan una línea de investigación más o menos razonable y después a gente como a mi nos meten por la ventana. Fue una forma de amedrentarme y que me callara la boca. Después está la Justicia. Al juez le caen con un informe con jerga informática y el no entiende nada de eso", afirmó Smaldone dando a entender que le indicaban al juez que decisión tomar.
De esta manera, el experto en informática contó que seis meses después le pidieron consejos al fiscal de la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (UFECI), Horacio Azzolin: "Él respondió que la investigación era un mamarracho. Hay cosas que no se hicieron, hay catorce días entre que se denuncia el hecho y que se hace público, donde no hacen nada. También sugiere una serie de medidas, como peritar los equipos que se secuestraron, librar oficio a empresas como Google, que ni lo pidieron".
Que esta causa sea archivada el día de la seguridad informática es como que Barreda sea declarado inocente el día del padre", dijo Smaldone.
"El fiscal y el juez se la pasaron ocho meses para averiguar la zona horaria de la argentina y nunca llegaron a mandar el pedido a la justicia de EE.UU. Eso se hace al principio, en una semana. Dos años después, perdieron tiempo y decidieron cerrar la causa, sobreseer a todo el mundo y archivar el expediente", comentó sobre lo que sucederá mañana, justo cuando se celebra el día de la seguridad informática. "Que esta causa sea archivada el día de la seguridad informática es como que Barreda sea declarado inocente el día del padre", ironizó Smaldone.
Luego se refirió a los ataques informáticos al Estado Argentino, como el ocurrido al Renaper hace poco: "Todo sistema es inseguro, todos tienen problemas. Acá lo que vemos es que no necesariamente las diferentes áreas tienen gente que estén pendientes a estos temas. Muchas de estas cosas ocurren porque hay sistemas corriendo en servidores que están en estado prácticamente de abandono. Ahora, lo que se hace después que pasa esto muchas veces es ocultarlo, y otras se persigue a aquel que alerta sobre lo que pasa, como a mi".
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En este sentido, aseguró que "faltan lineamientos y que hay gente trabajando en eso", pero que en principio "faltan recursos y gente capacitada". "No necesariamente tiene que ser personal de planta del estado que se ocupe todo el tiempo de estas cosas. Se pueden contratar servicios de empresas privadas, que en Argentina hay muy buenas. Después hay que hacer un cambio de política, no persigamos al que avisa, persigamos al criminal", sentenció.
