Movimientos indígenas y sociales de la Quebrada de Humahuaca marcharon a pie diez kilómetros para unir los pueblos de Juella y Tilcara contra la explotación del litio y el "avasallamiento extractivista” en Jujuy.
Los manifestantes emprendieron una marcha por media calzada de la ruta nacional 9 y caminaron unos 10 kilómetros que separan a los poblados de Juella y Tilcara para expresarse contra del uso del agua que se extrae en la puna jujeña para la explotación del litio.
El conflicto del litio
“Estamos en desacuerdo con la política que lleva adelante el Gobierno de Jujuy de extractivismo porque vemos que no hay trabajo, ni progreso como prometían”, indicaron referentes de la comunidad de Los Molinos, paraje cercano a la localidad quebradeña de Huacalera.
En ese sentido, agregaron que para el extraer el mineral, “solo se necesita maquinaria y no se nota la mano de obra local”, al tiempo que enfatizaron que el perjuicio es “contra las comunidades por la utilización del agua que requiere el proceso de explotación”.
El litio no se come, el agua vale más que el litio"
Alertaron además por “los daños se van a profundizar porque está clara la intención de ampliar la producción de litio”, razón por la cual se preguntaron “¿dónde se va a sacar más agua para abastecerse?”.
“El litio no se come, el agua vale más que el litio, porque eso es dañino para nuestra madre tierra, que la están secando”, definieron y manifestaron que “las comunidades indígenas son atropelladas, no se las respeta ni se las defiende y se permite que sus territorios se pongan a la venta”.
Jujuy envuelta en reclamos
Entre otros reclamos, los manifestantes repudiaron que se deje a los empresarios hacer sus negocios turísticos sin consultar a las comunidades como pasó en Las Salinas Grandes.
Por otra parte, integrantes de diversas agrupaciones sociales expresaron que la “realidad social de Jujuy es que los salarios son bajos, y están bajo la línea de pobreza, hay desocupación, y los alimentos son muy caros”.
Durante la caminata de reclamo afirmaron que “la protesta social está vista como un crimen en la provincia”, al considerar que “no se respeta los derechos humanos ni sindicales ante la violación de las leyes”.
“Salimos a marchar y demandar que no existe la paz, ni la unión, como dice el Gobierno en sus publicidades, ni mucho menos el trabajo, porque los trabajadores sociales no tenemos derechos, los están violando o nos ponen contravenciones, nos persiguen e intimidan”, finalizaron.