El DNU de Milei modifica las relaciones laborales y establece que cada gremio pueda negociar con las empresas el sistema de indemnización por despido sin causa, con un régimen que reemplaza la normativa actual por uno que se asemeja al de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA).
El régimen de la UOCRA fue pensado para un rubro, el de la construcción, en el que las relaciones laborales se extinguen cuando se terminan las obras. ¿De qué se trata el punto del DNU que se refiere a las idemnizaciones?
Siguiendo el modelo UOCRA, lo que busca la legislación de Milei es que el empleador pueda crear un fondo al que aportaría un 8% sobre el sueldo bruto del trabajador para indemnizaciones. El trabajador recibiría ese monto una vez cese la relación laboral, a diferencia del sistema de indemnizaciones actual, que prevé el equivalente a un mes de sueldo por cada año de antigüedad, considerando la mejor remuneración del último año.
El DNU que se publicó en el Boletín Oficial dice: "Mediante convenio colectivo de trabajo, las partes podrán sustituir el presente régimen indemnizatorio por un fondo o sistema de cese laboral cuyo costo estará siempre a cargo del empleador, con un aporte mensual que no podrá ser superior al OCHO POR CIENTO (8%) de la remuneración computable".
Además, "por su parte, los empleadores podrán optar por contratar un sistema privado de capitalización a su costo, a fin de solventar la indemnización prevista en el presente artículo y/o la suma que libremente se pacte entre las partes para el supuesto de desvinculación por mutuo acuerdo conforme artículo 241 de la presente ley", dice el DNU.
Otro punto polémico es que el decreto extiende el período de prueba de 3 a 8 meses. Por este motivo, durante ese lapso se podrá extinguir la relación laboral sin causa ni derecho a indemnización.
En el sistema de la UOCRA el empleador aporta al fondo de desempleo 12% el primer año y 8% los restantes. El dinero se deposita en una cuenta bancaria, es inembargable, genera intereses a favor del trabajador y queda a libre disponibilidad una vez finalizado el vínculo laboral. Así se establece en el convenio colectivo del gremio.
Según especialistas, como Nuria Susmel, economista especializada en mercado de trabajo y seguridad social, el modelo de la UOCRA apaña una condición laboral muy inestable, puesto que la construcción tiene alta rotación: la probabilidad de ser despedido es alta porque toda obra llega a su fin.
En cambio, hasta ahora, hecho que cambia con las medidas de Milei, "en el resto del sector privado la probabilidad media de ser despedido no es tan alta. Este sistema que propone el DNU es más caro que el que rige en la actualidad ya que el empleador deberá aportar al fondo por todos sus trabajadores. Ahora, el que no despide va a tener un costo que antes no tenía. Además, va a terminar cubriendo menos al despedido", indicó.