Mauricio Macri habló luego de la victoria electoral de Javier Milei y, entre otras cosas, llamó "orcos" a las personas que, potencialmente, se movilizarían en el futuro contra las medidas que tome el próximo gobierno. El expresidente dijo que, en los próximos meses, "los jóvenes no se van a quedar en casa, y los orcos van a tener que medir muy bien cuando quieran hacer desmanes en la calle". Pero, ¿qué son los orcos, la especie mitológica con la que comparó Macri a los potenciales manifestantes del futuro?

Los "Jötnar", el origen mitológico de los orcos

La idea de los orcos nace en la antigua escandinavia, en la mitología nórdica, compartiendo historias con personas como Thor, Odín o Loki. Para los antiguos nórdicos, orco era una forma despectiva de referirse a los Jötnar, una raza de gigantes con poderes similares a los dioses que habitaban en Jötunheim, la tierra de los gigantes. En general, no son amistosos ni buenos con los seres humanos ni con los dioses y, si no están en su propia tierra, habitan solitariamente en montañas o bosques alejados.

Los orcos de Tolkien, el ejército del demonio

Cuando John Ronald Reuel Tolkien, el autor del Señor de los Anillos, decidió escribir su saga, parte del objetivo era recuperar la sabiduría de las mitologías del pasado para las nuevas generaciones. Por eso, entre un montón de seres mitológicos, Tolkien retomó a los orcos nórdicos a través de viejas historias británicas, en las que se los trataba más como espíritus malvados o demonios, aunque los modificó para que entren en su trama épica.

En su mundo, la Tierra Media, los orcos son una especie de elfos corrompidos por el poder de Melkor, la representación del demonio en su historia. Durante la trilogía del anillo, nos encontramos con los orcos sirviendo a Sauron en la lucha de la oscuridad y el caos contra la luz y el orden por el control de la Tierra Media. Al final, el ejército de Sauron es derrotado junto a su líder, y vuelven a reinar sobre todo el mundo los seguidores de Eru-ilúvatar.

Cuando Macri utiliza a los orcos para referirse a los potenciales manifestantes, los ubica en el mismo lugar que los ponía Tolkien: apoyando al mal absoluto contra las fuerzas del bien, Sauron contra La Comunidad del Anillo, los monstruos contra el legítimo rey.