Juan Pablo Román, el delivery que le llevó churros a Lionel Messi, contó cómo fue que llegó a hacerle esa entrega a Antonela Roccuzzo. "Yo no me lo creo todavía, tiemblo cuando te lo cuento", expresó el joven de 21 años en Radio Con Vos.
En diálogo con Ernesto Tenembaum en ¿Y Ahora, Quién Podrá Ayudarnos?, el cadete comentó que al principio no quería ir al barrio privado donde vive la familia Messi porque se pierde mucho tiempo, pero que igualmente fue quejándose: "Cuando llegué, mientras esperaba a entrar, miré al cielo y dije 'qué lindo sería si lo cruzo'". Además, no sabía que el pedido era para el mejor jugador del mundo: "Cuando le digo al seguridad a qué lote voy, me dicen 'viniste con suerte hoy y vas a la casa del campeón'".
Román fue en auto hasta la puerta de la casa del astro argentino y se bajó para entregarlo: "Me acerco, abre la puerta el amigo de Messi y de atrás se asoma Antonela con el nenito". "Yo temblaba, tenía un nudo en la garganta. Pasó todo muy rápido", declaró. "Ella me agradeció rápido, les pregunté si me podía sacar una foto con Messi y me dijeron que estaba ocupado", señaló.
Por otro lado, el joven cadete reveló que su sueño era ser jugador de fútbol: "Soy rápido, era lateral". "Pero en 2017, cuando me estaba por ir a jugar a España, me chocó un auto y no se pudo dar el viaje", dijo Juan Pablo Román y agregó que intentó recuperarse del choque. "Quise intentar volver a jugar después de un tiempo, pero ya me sentía muy estresado y muy bajoneado con lo que me pasó. No quise saber más nada", detalló el delivery que le llevó churros a la familia Messi. "En el choque sufrí lesiones físicas, me fracturé la clavícula, pero me costó mentalmente", agregó.
Finalmente, reiteró su admiración para el capitán de la Selección: "Messi, para mi en lo personal, no tengo palabras para describirlo. es el mejor del mundo". "Estoy muy orgulloso de poder haberle llevado churros a Messi y sería un honor poder conocerlo a él y a su familia", concluyó.
