Zulma Lobato está pasando un momento difícil. Es que el pasado domingo se sintió muy mal después de haber asistido a misa y llamó de urgencia al 911, donde pidió una ambulancia para que la asista. Al llegar al lugar en donde se encontraba la actriz, los médicos decidieron trasladarla al hospital de Vicente López, donde le hicieron una tomografía computada para conocer qué era lo que tenía.

“Sintió un muy fuerte dolor abdominal. También le hicieron una ecografía abdominal y le suministraron calmantes. Se encuentra en observación a la espera de los resultados de dichos estudios”, subrayó su representante, Lautaro Reyes, en el momento en el que ocurrió el hecho.

No solo esto, sino que contó que los estudios no arrojaron nada extraño, pero que la también cantante piensa que todo esto tiene que ver con su problema renal. “La mandaron a su casa y está descansando, pero tendrá que estar atenta porque le falta un riñón”, recalcó Reyes, en diálogo con TN.

Es que, en diciembre de 2019, Zulma Lobato se sometió a una cirugía para resolver muchos de los problemas de salud que atravesaba. En este sentido, le sacaron un riñón por la presencia de múltiples quistes y estuvo en terapia intensiva durante varios días.

“Estoy contentísima porque me tuve que operar y me dieron por muerta. Pero viví de nuevo. Me salvaron. Estoy muy bien”, subrayó en ese entonces, en un programa de televisión, donde también se mostró ilusionada con hacer teatro en Mar del Plata.

No solo esto, sino que en diciembre de 2016 tuvo otro problema de salud, ya que, la diagnosticaron como portadora de VIH después de la violación que sufrió en la estación de tren de Munro. “Estaba muy decaída y había adelgazado como 30 kilos, estaba muy delgada. Le pedí a mi médica que me hiciera hacer un análisis de VIH porque no estaba bien, algo me estaba pasando. Al poco tiempo me dio la mala noticia”, concluyó la mediática, en una entrevista que le concedió a Paparazzi en ese entonces.