Seguramente en más de una visita al dentista salió el tema de la higiene bucal. Pastas de dientes, cepillos de cerdas finas o gruesas, hilo dental, enjuague bucal y otros tips que recomiendan los especialistas para tener una sonrisa saludable. Pero hay algo a lo que hay que prestarle especial atención y es al uso del cepillo de dientes… ¿Cada cuánto se tiene que cambiar sí o si?
Los especialistas recomiendan cepillar nuestros dientes tres veces al día: cuando nos levantamos, después del almuerzo y antes de irnos a dormir. Tener un cepillo acorde a nuestras necesidades es fundamental a la hora de tener una dentadura saludable y limpia, además de conocer cómo limpiarla correctamente.
Pero así como el cepillo de dientes es nuestro mejor aliado, también debemos tener en cuenta que no es eterno. Según indican los expertos, debemos reemplazarlo por uno nuevo cada 2 meses. En total, deberíamos cambiarlo unas 3 o 4 veces al año.
Esto se debe a que tiene un determinado tiempo de vida útil. Con el paso de los días podemos ver cómo las cerdas se van deteriorando. Si continuamos utilizando un cepillo en mal estado, no estaríamos eliminando de forma correcta la placa bacteriana, lo que podría provocar alguna enfermedad en nuestros dientes.
Además, el cepillo acumula una gran cantidad de bacterias. Por lo tanto, también es importante reemplazarlo después de pasar por alguna gripe, resfriado, dolor de garganta o infecciones bucales, ya que los gérmenes de estas enfermedades pueden quedar entre las cerdas y volver a ingresar a nuestro organismo.
Después de cepillarse los dientes, es importante dejar secar el cepillo con el aire. Esto evita la acumulación de gérmenes. Entonces, si solés cerrarlo con algún plástico, esperá a que esté completamente seco.
Para una correcta higiene dental, debemos cepillar cada diente y muela por todas sus caras, sin dejar ningún espacio. El tiempo del cepillado no debe ser inferior a 3 minutos, utilizando unos 30 segundos para cada cuadrante de la boca. La lengua y las encías también deben cepillarse, pero de manera más suave.