El Ministerio de Educación de San Juan suspendió de manera preventiva a un profesor de Teatro y hasta podría ser echado por leer un cuento del escritor Hernán Casciari a sus alumnos de segundo año. Al conocer el texto, los padres se quejaron ante las autoridades porque, según plantearon, el material tiene "escenas pornográficas" y "material indebido".
Se trata del docente Juan Esquibel, quien decidió leer el cuento "Canelones" a raíz de haber mencionado al autor en una de sus clases en la Escuela Normal Sarmiento. A los chicos les encantó, pero sus padres parece que no lo tomaron de la misma manera. El problema fue que estos leyeron un fragmento que, al sacarlo de contexto, alertó a todos por mencionar las palabras "teta", "culo" y "poronga".
El profesor leyó un resumen del cuento "Canelones", de Casciari. A los chicos les gustó tanto que buscaron el texto completo, que incluye tres malas palabras. Por eso, los padres se quejaron y podrían echar al docente.
El tema es que la "escena pornográfica" que desató la polémica tiene que ver con una anécdota del escritor -que siempre oscilan entre la realidad y la ficción-, que cuenta cómo una broma telefónica que hace con un amigo se les va de las manos. Al sacarse de contexto las "escandaladas" citas, el material parece una cosa que no es.
Lo peor de todo es que lo que leyó el profesor en el aula no contenía ese fragmento "polémico". Él leyó un resumen del cuento, pero a los alumnos se interesaron y buscaron el texto completo por su cuenta. Ahí fue cuando se desató el problema.
Sin embargo, la directora de Educación Secundaria del Ministerio de Educación, María Buttazzoni, declaró que "según nos informaron, el profesor entregó un texto con contenido sexual y sobre homosexualidad a sus alumnos". A partir de esta situación, el propio Casciari se encargó de comunicarse con el docente, con la rectora del Normal Sarmiento y hasta con la ministra de Educación de la provincia cuyana.
Las conversaciones de Casciari con los protagonistas
“Yo les leí el cuento y es lo que no les ha gustado a los padres porque han hecho una captura mal intencionada del texto y lo han andado divulgando por grupos. He recibido amenazas, me quieren golpear”, contó Esquibel. El escritor, por su parte, le dijo que le parecía una injusticia: "El texto no dice nada. No es una cuestión de intención sino de percepción".
A su vez, la rectora del colegio en cuestión, Marcela Herrera, le dijo que las autoridades del Ministerio están “muy preocupadas por que no estalle el escándalo. Pero los padres van a decir cualquier cosa, y los medios empiezan a replicar y perseguir". En esa línea, dijo que "están haciendo una caza de brujas con versiones que circulan, y yo no me voy a manejar con eso. Iré reconstruyendo paso a paso y escuchando a los actores de esta historia".
Luego de que Casciari le ofreciera ayudar, le señaló que quien más la iba a necesitar era el docente. “Te va a necesitar Juan, porque yo estoy siendo cautelosa, pero esto no depende de mí porque no soy autoridad del Ministerio. Creo que ya hay una condena social, donde han empezado a difundir cosas personales de Juan que yo no puedo frenar”, aseguró.
Por su parte, la ministra de Educación sanjuanina, Cecilia Trincado, le dijo que está actuando de oficio una jueza de menores, aunque dijo "no saber los detalles de la situación". Durante la charla, Casciari remarcó varias veces que están castigando a un docente por leer un cuento que hizo que los chicos se interesen en buscar más información, algo no tan común en estos tiempos.
