La periodista y escritora Claudia Piñeiro recomendó dos series de cara al fin de semana en su columna semanal en el programa Tarde para Nada en Radio con Vos.
"Son dos series que están causando sensación, de las que todo el mundo habla y que están para maratonear", adelantó Piñeiro, sobre las series que pueden verse en Netflix.
"El juego del calamar es una serie coreana que tuvo un éxito impresionante en todo el mundo, a veces las series no llegan tan lejos de su lugar de origen, no todas son La casa de Papel, pero esta va camino a ser la más vista en la historia de Netflix", enfatizó Piñeiro.
"La serie te plantea un juego de supervivencia, un tipo de historia en la que las personas se meten a un juego en el que tienen que sobrevivir; son personas muy desahuciadas en la sociedad en la que viven, en ese sentido es similar a lo que muestra Parásitos, son personas en riesgo de exclusión", comentó Piñeiro. "Hay 456 personas que llegan con un contrato de confidencialidad que dice que una vez que entran tienen que seguir y solamente se puede suspender el juego si todas las personas están de acuerdo", añadió.
"El juego del calamar es un juego muy usado en Corea entre los chicos, son juegos relacionados con los de la infancia pero un poquito cambiados. El primer juego es una especie de "1, 2, 3... cigarrillo 43" que se llama "rojo y verde" que es una luz que, mientras está en verde, todos empiezan a correr y cuando se pone roja se tienen que quedar quietos, si no te quedás quieto perdiste y en este juego si perdés te pegan un tiro y así van eliminando competidores", explicó Piñeiro que cerró: "son nueve capítulos, es muy entretenida, muy violenta, no es el tipo de serie que más me atrae".
Respecto a la segunda recomendación, Piñeiro explicó que "es una serie de terror que se llama Misa de medianoche" y comentó: "me gustó mucho, es una serie de Mike Flanagan en la que no sabés si son fantasmas o vampiros".
Sobre el argumento, Piñeiro destacó: "es una isla donde un día vuelve un muchacho que vivió ahí, que un día tiene un accidente en el que muere la persona que iba con él en el auto y a partir de ahí va cuatro años a la cárcel y cuando sale va a la isla y junto con él llega un cura, todos en el pueblo son católicos muy fanáticos -salvo el sheriff y su hijo que son musulmanes-". "La serie tiene una gran crítica al fanatismo religioso y hay una gran reflexión sobre la muerte", precisó y comentó: "Stephen King la recomendó".
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