La ministra de Seguridad, Sabina Frederic dijo que "la responsabilidad por lo sucedido está por arriba de la Gendarmería" y pidió a "no cortar el hilo por lo más delgado" en referencia al envío de municiones a Bolivia en noviembre de 2019 por el gobierno de Mauricio Macri, cuando se llevó a cabo el golpe de Estado en el país vecino, que ya está siendo investigo por el juez, Javier López Biscayart.
En relación al sumario a los gendarmes, Frederic contó: "Tiene por lo menos un mes y medio más para que termine". Por otro lado, advirtió que el expresidente Mauricio Macri quiere frenarlo porque con el avance de las investigaciones internas ellos pierden el control de lo que ahí surge como evidencia y eventualmente como prueba.
"Los spray junto con las municiones tienen egreso porque están en una nota proforma de la Gendarmería, pero las 61 granadas CN, 200 granadas CS y 400 granadas HC tienen una anotación que dice no embarcado. Ahí hay una cuestión que está siendo analizada en el sumario de la Aduana porque no está muy claro finalmente qué es lo que embarcaron y qué no. De todo eso vuelven 160 granadas CS y 360 granadas HC", expresó la ministra de Seguridad.
Además, contó: "Los integrantes del grupo Alacrán que viajaron en el vuelo del Hércules manifiestan haber visto los pallets con las municiones, como las deben haber visto los tripulantes de la Fuerza Aérea que estaban en el vuelo",
Frederic afirmó que al llegar a Bolivia los integrantes de la Gendarmería se dividen en dos grupos de 5 y 6 respectivamente y que el primer contingente se dirigió a la embajada Argentina en La Paz, mientras que otro grupo a la residencia del embajador.
"Hay que ver cómo fue la relación entre la Fuerza Aérea Boliviana y la embajada. ¿A través de quién fue? Cuando digo involucrados, quiero decir que fueron parte. Pueden ser testigos, no necesariamente responsables directos, pero que han sido parte de esta operatoria que fue muy compleja", añadió Frederic acerca de los integrantes de las Fuerzas Armadas.