La grafología analiza la forma de escribir para revelar detalles ocultos de nuestra personalidad y nuestros secretos más íntimos. Así, es capaz de saber cuáles son nuestros mayores temores con solo ver cómo escriben la letra "P". ¿A qué hay que prestarle atención?

La manera de escribir puede reflejar pasajes de nuestra conciencia, pero también del inconsciente. Así al menos lo demuestran los grafólogos, que pueden sacar una imagen de la forma de ser de una persona con solo ver cómo escribe.

Si bien no es considerada una ciencia, la grafología se utiliza en procesos de selección de personal y es muy útil para conocer a las personas desde otra perspectiva. ¿Qué dice la letra "P" de los miedos más íntimos de una persona?

Qué temores revela la forma de escribir la "P" según la grafología

Existen distintas maneras de escribir la letra "P" y cada una de ellas tiene sus particularidades para el análisis grafológico. En ese sentido, hay que prestarle atención a diferentes cosas, entre las que destacan:

• El trazo inicial: si no lo tiene, la persona presenta un nivel de independencia e inteligencia distinto al resto. Si el trazo inicial está interrumpido o separado del resto de la letra, la personas tiene dificultad para adaptarse a la sociedad y tiene miedo de hacerlo. Por su parte, si el trazo es curvo, se trata de una persona con doble cara, que oculta parte de sí y teme ser descubierta.
• El eje: en caso de ser corto, la persona tiene conflictos para llevar a cabo su proyecto de vida. Si, además, es débil, denota problemas de libido y sexuales, con el respectivo miedo de ser descubierto. Cuando el eje es demasiado largo, se trata de una persona muy energética, activa, con mucha sensualidad, y que incluso puede ser muy fantasiosa. Si está inclinado hacia la izquierda, se suma una gran suceptibilidad y contradicciones internas.
• El arco: si es estrecho, la persona carece de energía, tiene muchos miedos que le impide avanzar en la vida. Si se encuentra alejado del eje, puede revelar conflictos en el trabajo, aunque también demuestra una buena adaptación a las nuevas situaciones. Las curvas muy infladas son personalidades muy jactanciosas pero vagas y lentas, sin iniciativa propia.

Los test de personalidad, en los que se ve involucrada la grafología, se usan comúnmente en el área de la psicología clínica. Estas pruebas permiten evaluar rasgos psicológicos y de comportamientos de un individuo en específico y se usan, sobre todo, en procesos de selección de personal.