Apenas comenzó la segunda jornada del debate por la Ley Ómnibus en la Cámara de Diputados de la Nación, los funcionarios empezaron a cruzar acusaciones por medio de las cuestiones de privilegio. La tensión se apoderó del recinto desde la primera intervención, cuando se empezó a hablar sobre la represión y demás conflictos que tuvieron lugar el día de ayer en las puertas del Congreso.
La primera en hablar fue la diputada radical Roxana Reyes, quien buscó separar a los militantes de su espacio con los de izquierda o kirchneristas: “Los militantes radicales no tienen la cara tapada, no tiran toneladas de piedras y se manifiestan pacíficamente. Lo que sucedió ayer, con militantes radicales mujeres que han sido detenidas en las inmediaciones del Congreso mientras se manifestaban pacíficamente, ha sido claramente un exceso”.
A partir de esa declaración, otros diputados como Myriam Bregman y Romina Del Plá, del Frente de Izquierda, se refirieron a las detenciones y represión de ayer por la noche, y le respondieron a Reyes por su "extremo sectarismo". "Me asombra que la diputada utilice su espacio para atacar al resto de los que son reprimidos", dijo Bregman, mientras que Del Plá aseguró que repudian "todas las detenciones arbitrarias de cualquier persona que se manifieste, de cualquier signo político".
Por su parte, Eduardo Toniolli, de Unión por la Patria, se refirió al mismo tema, y también le respondió a la funcionaria de la UCR: "Perdió la oportunidad de condenar sin más la violencia institucional, que es lo que debemos hacer todos. No importa de quien se trate la víctima, llámese el diputado Vilca (FIT) o la militante radical Ivanna Bunge".
Pero todo se caldeó más cuando Damián Arabia, del PRO, tomó la palabra y denunció justamente a Toniolli, quien intentó ayudar a las mujeres detenidas ayer, de haber golpeado a un policía: “Un diputado kirchnerista le pegó anoche una piña a un policía, que ahora está internado con un diente menos, y ahora está en la Cámara pidiendo mociones de privilegios. Curiosamente el mismo diputado que defendía fiscales socios del narcotráficos de Santa Fe”.
Tras esa acusación, diputados como Germán Martínez, Cecilia Moreau y Paula Penacca, de la bancada de Unión por la Patria, cuestionaron la moción de Arabia. Lo objetaron por no exteriorizar a quién era dirigida su moción de privilegio, así como también por realizar una realizar una acusación tan grave sin “presentar la denuncia”.
Al momento de la intervención de Moreau, la diputada se dirigió directamente al presidente de la cámara, Martín Menem, cuando este le pedía que redondeara: “No todo tiene que ver con las formas y con el tiempo, usted también tiene que hacer valor el rol de los fueros… Se lo digo porque lo votamos todos. A mí me lo dijeron durante años”.
Fue en ese momento cuando Menem, que intentaba llamar a la cámara a la diputada, decidió cortarle el micrófono, ya que la representante peronista continuaba hablando, dando lugar así a más tensión en el aire, que ya a esa altura podía cortarse con un cuchillo.
