"Pasado mañana arranca la Cumbre por la Democracia, que armó Estados Unidos para confrontar con China" contó Alejandro Bercovich al comienzo de su editorial. "Joe Biden invitó a unos 100 países para enfrentar a la potencia emergente, que viene desafiando su hegemonía en todos los ámbitos, sobre todo el tecnológico" comentó el periodista.
A esa cumbre, destacó el conductor de Pasaron Cosas, "no están invitados Bolivia, Nicaragua, El Salvador, Guatemala, Haití ni Cuba". Para el economista, "Estados Unidos excluyó a los países que no le caen bien". La convención es, según planteó Estados Unidos. contra el autoritarismo, la corrupción, y para promover el respeto a los Derechos Humanos. Según Bercovich, "estos son valores que casi todo el mundo comparte, la diferencia está en como se persiguen".
Estados Unidos excluyó a los países que no le caen bien".
"Lo que me interesa destacar- expresó Bercovich en Radio Con Vos- es que la Argentina recibió la invitación y Alberto Fernández la aceptó". "Esta adhesión de la Argenitna se da en un contexto de mucha tensión entre La Casa Blanca y el gobierno chino", subrayó. En ese contexto, y en un "momento especialmente delicado para la Argentina en términos financieros, el presidente "va al redil de Estados Unidos". Sin embargo, la Argentina "no está obteniendo nada a cambio" de esto.
El periodista comentó: "El viernes tenemos una movilización por el día de los derechos humanos, de la democracia". Allí van a hablar Alberto Fernández, Cristina Kirchner y Lula da Silva. "Vamos a hacer una celebración de la democracia un día después de que nuestro presidente participe de una cumbre de la democracia que en realidad es solo un desafío a China" opinó.
Hay como un acuerdo entre oficialismo y oposición en que no hay alternativa a esta nueva era de relaciones carnales con el FMI y Estados Unidos".
En cambio, destacó Bercovich, "el sábado va a haber otra marcha, mucho menos publicitada". Convocan "gremios, organizaciones sociales, partidos de izquierda" a las 4 de la tarde en la Plaza de Mayo. La consigna es, sencillamente, No al FMI. "Ahí -planteó- va a estar más clara la discusión entre el ajuste y la gente". Para el periodista, esto contrasta con el "acuerdo entre oficialismo y oposición en que no hay alternativa a esta nueva era de relaciones carnales con el FMI y Estados Unidos". "Acudimos a abrazarlos pisoteando la relación con otros aliados" dijo el economista.
El periodista concluyó: "La Argentina siempre hizo equilibrio entre las distintas potencias, pero me parece que ahora, a caballo de algunas figuras del gobierno con muy buena relación con los Estados Unidos, ese equilibrio se está perdiendo".