Luego de que el ministro de Salud bonaerense Daniel Gollan criticara la falta de cuidados en el inicio de ShowMatch, el conductor le respondió duramente. Ayer por la noche Marcelo Tinelli, visiblemente molesto, explicó que su programa cumplía con todos los protocolos y chicaneó con el procesamiento de Gollan por el Plan Qunita.

Furioso por las declaraciones del funcionario de la Provincia, quien sostuvo que la aglomeración de personas en el estudio era “una imagen absolutamente negativa”, Tinelli explicó: “Le quiero decir que todos los cuadros que hicimos ¡fueron grabados, ministro!”.

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El conductor no pasó por alto las críticas que recibió en las redes sociales, por el mismo motivo, y al respecto dijo: “Que lo diga la gente está todo bien, pero que lo diga el ministro de Salud es raro". Pero a medida que continuaba hablando, Tinelli iba poniéndose cada vez más enojado y, según él mismo, "con ganas de decir cosas".

Hay que ver adónde está el juicio de Gollan. Lo debe tener la Justicia, pero eso no es mala imagen, por ahí esto era mala imagen”, expresó Tinelli.

Para finalizar Tinelli hizo referencia a la presunta acusación que pesó sobre Gollán por “administración fraudulenta” en el Plan Qunita: “El ministro seguro se preocupa por esta imagen, pero ¿te acordás que fue procesado?, ¿que había metido licitaciones que tenían unos kit medios truchos en el 2016?”, disparó.

Antes de dar comienzo al show, Tinelli concluyó: “Hay que ver el juicio de Gollan adónde está. Lo debe tener la Justicia, pero eso no es mala imagen, por ahí esto era mala imagen”.

La causa Qunita hoy

La denuncia original provino de  la ex ministra de Salud Graciela Ocaña y la instrucción estuvo a cargo del fallecido juez Claudio Bonadio. El objetivo del Plan Qunita era dotar a las madres de recién nacidos de un kit de productos que permitieran bajar la mortalidad de bebés entre uno y seis meses.

Los acusados fueron Aníbal Fernández, el entonces ministro de Salud Juan Manzur y otros 21 funcionarios, entre ellos  Daniel Gollan y Nicolás Kreplak. 

Los peritos consideraron por unanimidad que el material cumplía los objetivos y los problemas de terminación eran detalles menores. En cuanto a los  los supuestos sobreprecios, los peritos sostuvieron que era imposible determinar un precio de referencia porque no existía un kit igual en el mercado para hacer una comparación en forma directa.