En la Feria del Libro, Agustín Laje realizó la presentación de "Batalla Cultural", el libro en el que trabajó durante 7 años. Estuvieron presentes en la charla –que duró dos horas– el diputado libertario Javier Milei y el escritor Nicolás Márquez, en un auditorio lleno.

Tiempo antes de comenzar la charla, una enorme cantidad de personas -en su gran mayoría jóvenes, pero con presencia de todos las edades e incluso algunos bebés- comenzaron a hacer fila para poder escuchar la disertación y "las propuestas del cambio". El auditorio José Hernández -el más grande de la feria- tiene capacidad para mil personas: algunas escucharon paradas, pero muchas otras no lograron ingresar y quedaron esperando a que termine el encuentro para que les firmen sus libros.

El filoso discurso de Nicolás Márquez

Márquez sostuvo que el libro se trata de un "trabajo intelectual" que puede ser leído "por un filósofo y por un laburante". Confesó estar nervioso "porque nunca había dicho unas palabras delante de un futuro presidente”.

"Este libro no llama al diálogo cultural, es la batalla. Estamos en una suerte de guerra, no tenemos adversarios, sino enemigos: la progresía, la podredumbre y todos sus aliados impensantes, la casta y no solo la política: la periodística también", subrayó.

No tenemos adversarios, sino enemigos y hay que aniquilarlos y aplastarlos ideológica y políticamente.

Nicolás Márquez

Y añadió: "Tenemos enemigos y hay que tratarlos como tales. Tenemos que aniquilarlos y aplastarlos ideológica y políticamente y para eso necesitamos un compromiso militante".

En ese mismo sentido, disparó contra el oficialismo y denunció violaciones a los derechos humanos sistemáticas como los 30 mil abortos que se hicieron durante este gobierno, a los que calificó como "30 mil muertes", y los "tres mil militares injustamente e ilegalmente detenidos por haber combatido al terrorismo".

"No debaten ideas respetables. Ellos vienen por la vida, por la libertad, por la propiedad", cerró.

Javier Milei, su lucha contra la izquierda y la batalla cultural

Con una ovación de pie, el dirigente libertario fue recibido por el auditorio que empezó a cantar: "Milei mi gran amigo, esta campaña volveré a estar contigo". Vistiendo un traje, a diferencia de su ya característica campera de cuero (y aparentemente sin un chaleco antibalas), comenzó a hablarle a todos los presentes con un tono mucho menos efusivo que en sus habituales discursos políticos.

"Perdimos la batalla cultural, pero estoy convencido de que podemos ganarla y de hecho, la estamos ganando", apuntó.

Para demostrar su punto, hizo un recorrido histórico en el que se remontó al Muro de Berlín y denunció que quienes viven en un país socialista "viven en el infierno". Citando autores, aseguró que el socialismo "es un error teórico y práctico" frente a la evidencia empírica y se tuvo que preguntar entonces "¿por qué ganaron?".

Para el libertario, la izquierda ha logrado establecer que "acá está la gente que no tiene alma y corazón y a la que que solo le importa la eficiencia", mientras que ellos "tienen sentimientos y son humanos".

Los que se vendieron como buenos son más malos que los malos.

Javier Milei

"La izquierda cuestiona que el sistema y el capitalismo sea justo y se planta sobre un falso altruismo con la idea de la igualdad", dijo Milei, y agregó que solo "son altruistas con la ajena y no con la propia" y que en el fondo, subyacen "los valores explícitos de la envidia, el odio, el resentimiento, el trato desigual frente a la ley y el asesinato".

"Frente a este conjunto de valores, todo lo que va a salir son instituciones espantosas que llevan a la miseria y fracasan siempre", apuntó el dirigente y expresó que, en cambio, "el liberalismo es el respeto del proyecto de vida del prójimo basado en el principio de no agresión y en defensa del derecho a la vida, a la propiedad y a la libertad".

Yo confío en ustedes porque si no me ponen los votos, no gano.

Javier Milei

"No subestimen la batalla cultural, pero tampoco la política, porque si no tenés una pata en la política real, nos llevan puestos. Podemos ganar los debates que quieran, pero después en la Cámara hacen lo que quieren", explicó.

Luego añadió: "Están descubriendo que los malos son realmente malos, pero que los que se vendieron como buenos son más malos que los malos y quiero invitarlos a dar la batalla cultural".

Milei cerró su disertación al grito de "viva la libertad, carajo", que fue respondido con un "viva" las tres veces que lo pronunció: "Yo confío en ustedes porque si no me ponen los votos, no gano”, concluyó

Laje y una dedicatoria a quienes "estamos resistiendo"

Finalmente, fue el turno del autor, que reúne 689 mil seguidores en Instagram. En su exposición, Laje pasó por conceptos teóricos y recorridos históricos con ayuda de diapositivas. También se extendió sobre algunos ejes abordados en su libro y celebró este encuentro en "el epicentro del progresismo: La derecha está copando la Feria del Libro gracias a ustedes".

Laje expresó que, para cambiar al hombre, hay que cambiar la cultura, y sostuvo que "el poder es más poderoso cuando no se nota, cuando te acaricia y te incluye y no cuando te apunta a la cabeza con un arma". También reivindicó ser parte de la derecha y sostuvo que no hay que acomplejarse "por una palabra tan linda".

La derecha está copando la Feria del Libro gracias a ustedes.

Agustín Laje

Para ganar la batalla frente a "la segunda ola socialista del siglo XXI", Laje sostuvo que los movimientos internacionales deben unirse en esta "nueva derecha", que esta batalla cultural es también política y que se trata de resistir.

"El libro está dedicado a quienes estamos resistiendo", dijo y enumeró en ese grupo a los "padres de familia que quieren educar con sus valores", a los "chicos que están se dan cuenta de que están siendo adoctrinados", "los hombres demonizados por la cultura feminista, que les hace creer que su masculinidad es tóxica y se flagelan entre ellos si ven una teta".

Laje dedicó su libro a "los hombres demonizados por la cultura feminista, que se flagelan entre ellos si ven una teta".

Tampoco dejo afuera a "las mujeres, que saben que el feminismo no es colectivismo", a "las personas trans que engañaron con que cambiar de sexo es cambiar de color de camisa", a los creyentes, a los homosexuales "que no quieren politizar su identidad sexual", a los heterosexuales y a la juventud.

Para cerrar su presentación y dar comienzo a la firma de libros, le habló a los jóvenes: les dijo que lean, que se comprometan con "una formación y cultura" no solo desde TikTok o redes sociales y cerró: "Necesitamos soldados en esta batalla cultural".