En la Ciudad de Buenos Aires hay muchísimos autos, y la cantidad aumenta todo el tiempo. Los espacios de estacionamiento, a menos que se construyan nuevos edificios que cumplan esa función, se mantienen estables. Esta situación generó que algunos porteños recurran a avivadas ilegales para asegurarse un espacio para su auto cerca de su casa, lo que se volvió indisimulable la semana pasada, cuando se viralizó una denuncia que mostraba como algunos vecinos de Recoleta colgaban carteles truchos de «No Estacionar» para quedarse con un pedazo de espacio público.
Luego, la Secretaría de Transporte de la Ciudad empezó a fiscalizar algunas calles y comprobó, que de hecho, había carteles falsos de Prohibido Estacionar. La llamativa situación dejó en evidencia la falta de control de la calle por parte del Gobierno de la Ciudad y ahora la asociación civil Defendamos Buenos Aires denunció que hay 10.000 carteles truchos de Prohibido Estacionar en toda la ciudad.
En diálogo con el diario Tiempo Argentino Javier Miglino, el presidente de la ONG en cuestión, afirmó: «El relevamiento surge a partir de la denuncia de vecinos que recibían multas de tránsito del gobierno porteño por haber estacionado el auto en lugares donde no está prohibido». Siguió: «Porque si vos dejás el vehículo estacionado donde hay un cartel trucho te multan igual. Es decir, Rodríguez Larreta gana por partida doble: con quienes estacionan el auto en lugares donde está permitido o si estacionan donde están estos carteles truchos«. Además, Miglino pidió que, si alguien más tiene una denuncia de este tipo, escriba al mail ongdefendamosbuenosaires@gmail.com.
De acuerdo a la ONG, los cinco barrios donde más se concentran estos carteles truchos son Palermo, Belgrano, Recoleta, Almagro y Flores. Sin embargo, afirman que esto sucede «en todo el distrito» y «prácticamente en todas las cuadras». Para Miglino, esto ocurre por «el egoísmo de los propietarios que se adueñan del espacio público y por la complicidad de la administración de Rodríguez Larreta».
Además, el titular de la ONG advirtió que desde la organización van a esperar 48 horas para que el gobierno porteño «retire todos los carteles truchos». En caso contrario, harán una denuncia penal contra el Gobierno.