El gasoducto tiene una nueva traba: le dieron poder de veto a los mapuches de Neuquén

El gobierno tiene jugado buena parte de su, cada vez menor, capital político en el Gasoducto Néstor Kirchner. Cómo explicó el periodista Alejandro Bercovich, el Frente de Todos pone sus esperanzas en completar buena parte de la obra para el invierno del año que viene como forma de evitar una devaluación. Ahora, el gobernador Ómar Gutiérrez, de Neuquén, le puso una nueva traba a su concreción.

El gobierno de la provincia patagónica le propuso a caciques y líderes mapuches un particular acuerdo, que les entregaría poder de veto a las comunidades sobre el gasoducto. El Protocolo de Consulta Previa, Libre e Informada (CLPI) le da a los referentes originarios de Neuquén la posibilidad de intervenir y hasta vetar el proyecto que podría ahorrarle miles de millones de dólares a Argentina.

Regresamos a nuestros territorios llevando esta buena nueva que fortalece nuestro trabajo organizativo y que nos permite proyectar un Kvme Felen/Buen Vivir en nuestros territorios.

El protocolo en cuestión le da el poder a los dirigentes de la zona pedir dinero, beneficios y otras retribuciones en aquellos casos en los que la obra atraviese un territorio que ellos consideren propio por tenencia ancestral. La obra, por supuesto, no fue diseñada teniendo en cuenta este criterio, ya que ni el estado nacional ni el provincial le reconocen la tenencia de estas tierras a ninguna comunidad mapuche.

El protocolo que presentó el gobernador obliga a su provincia a tomar una serie de pasos administrativos antes de «emprender o autorizar cualquier programa de prospección o explotación de los recursos naturales existentes en tierras de comunidades indígenas«. Los pueblos originarios de la zona podrán plantear reclamos que podrían retrasar la marcha de las obras por meses.

Para resolver dichos reclamos, el estado deberá encarar una serie de convocatorias, reuniones, informes, audiencias y actuaciones antes de siquiera comenzar a trabajar en el gasoducto. La Confederación Mapuche de Nequén, por su parte, festejó: «Regresamos a nuestros territorios llevando esta buena nueva que fortalece nuestro trabajo organizativo y que nos permite proyectar un Kvme Felen/Buen Vivir en nuestros territorios«.