Luego de cuatro meses en que la inflación superó el 6%, el Indec anunciará hoy un registro del IPC del noviembre, que el Gobierno espera que quede, por fin, por debajo de esa cifra.
La expectativa es compartida, al menos parcialmente, con las consultoras privadas a partir de la indiscutida desaceleración en la suba del precio de los alimentos, que normalmente tiene una incidencia importante en el indicador.
A la tradicional baja de precios que se produce estacionalmente en noviembre, este año se añadió una merma en el crecimiento del precio de la carne debido a la sequía. Como bajó la disponibilidad de granos para alimentar el ganado, aumentó la oferta de animales que fueron enviados a los frigoríficos en vez de continuar en engorde.
Además, entró en vigencia el programa Precios Justos que, en esta ocasión, habría tenido un mayor impacto sobre el mercado de lo que había logrado Precios Cuidados en sus últimas versiones. El programa congeló el precio de más de 1.500 productos en una primera etapa y puso un tope, además, sobre una cantidad mucho mayor ya que se acordó con los fabricantes que participan del plan un techo de 4% de suba mensual para el resto de los bienes que comercializan en supermercados.
Las negociaciones se iniciaron durante octubre y garantizaron a las empresas participantes el acceso a dólares a precio oficial para importar insumos clave en su producción. A cambio, gran parte de los proveedores revisaron a la baja las listas enviadas originalmente para adecuarlas a la intención oficial de no sobrepasar el 4%. Un gesto en medio de la negociación.
El desafío ahora será lograr que la estructura de costos acompañe para que, en los próximos meses, el efecto se sostenga. Por este motivo, Economía cerró el martes a última hora un acuerdo con proveedores de cartón, vidrio, aluminio y productos químicos, insumos con los que se fabrican principalmente envases de una infinidad de productos.
Entre los rubros que no lograron buenos resultados y que empujan la cifra del Indec al alza, destaca la vivienda que, según todas las mediciones privadas, presentará el de mayor incremento dado el impacto de la quita de subsidios y los aumentos de tarifas en los servicios públicos.