La automatización del trabajo es, desde hace 200 años un fenómeno imparable. Así como los primeros tractores y automóviles le sacaron su trabajo a los caballos y bueyes, muchas profesiones humanas fueron y serán víctimas de su inescapable efecto.

En este caso, se trata de los bartenders. Ya hay varios productos en el mercado pensados para atender a clientes en un bar, preparar y servir tragos alcohólicos. Los principales son Cecilia.ai y el robot Yanu. Ambos funcionan en base al reconocimiento de voz, lo que es decir, vos le explicás tu preferencia y el robot entiende y prepara tu pedido.

De acuerdo a declaraciones de Elad Kobi, el CEO de la empresa detrás de Cecilia.ai, su robot «puede conversar con los clientes y, cuando eligen un cocktail específico, lo puede hacer en vivo«. Cada unidad de Cecilia.ai se puede llenar con 70 litros de diversas bebidas, y puede servir hasta 120 tragos por hora. El robot, que salió a la venta el pasado 24 de febrero, cuesta unos 45.000 dólares. Sino, se lo puede alquilar por un mes por un costo de 2.000 dólares. 

Uno de sus competidores es el robot Barney, creado por la empresa F&P Robotics. Este consiste en una mano capaz de agarrar un vaso y moverlo entre distintas expendedoras de bebidas. El robot producido por la compañía suiza sale alrededor de 130.000 dólares.

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También está Yanu, de la empresa de origen estonio del mismo nombre. Este vale alrededor de 150.000 dólares. Entre las ventajas de tener un robot para servir tragos se encuentra la consistencia a la hora de usar el alcohol, ya que cada trago llevará las cantidades especificadas por el dueño de las diversas bebidas.