Tomás Kirzner, el hijo de de Araceli González y Adrián Suar, relató en el programa programa de Telefe PH: Podemos Hablar, que conduce Andy Kusnetzoff, cómo fue víctima de abuso sexual en dos ocasiones.
Todo comenzó cuando el conductor le preguntó a sus invitados “¿a qué momento les gustaría volver?”. Entonces, el joven actor respondió: “Hay un Toto de siete años al que en determinada situación le hubiese dicho: ‘No hace falta ver a tu amigo hoy, lo podés ver otro día’. Le insistiría en que lo puede ver mañana o esperar unos días más”.
“Soy una persona muy ansiosa, todo lo quiero ahora y ya. Aquel día, con siete años, quería ir a la casa de mi amigo que vivía por zona norte como mi familia y yo. En el barrio estaba laburando una persona a la que yo no había visto tanto. Estaba empecinado con llegar a la casa de mi amigo cuando me lo encuentro a él, que lo tenía de vista por haberlo cruzado en un par de oportunidades. Estaba con un rastrillo del lado de la calle y me empezó a hablar. No sé por qué pero en un momento sentí que se empezó a oscurecer todo y yo me quería ir. Me empecé a alejar, él lo empieza a notar y finalmente ocurre. No voy a entrar en detalles porque es horroroso”, detalló.
«El lugar en donde vivía terminó siendo una pesadilla», contó Tomás Kirzner.
“[Al hombre] Lo conocían en los lugares que yo frecuentaba. Me acuerdo que me fui corriendo y llorando, no sabía a quién decirle. No lo vi más por un tiempo pero después volvió. El lugar en donde vivía terminó siendo una pesadilla. Ocurrió una segunda vez y después nunca más”, continuó.
Posteriormente contó que la primera en enterarse fue su mamá y que actualmente se encuentra «bien con el tema» y lo tiene «naturalizado». «Decirlo acá me juega en contra, ¿lo habré dicho bien o mal? No sé de qué va a servir que lo diga, pero quizás porque ahora estoy tan tranquilo con el tema lo puedo contar libremente”, concluyó.
Su testimonio generó una gran repercusión y sus seguidores le dejaron numerosos comentarios de apoyo en sus redes sociales. Entre los mensajes de cariño, se encuentra un posteo de su hermana, Florencia Torrente: “Siempre fuiste un niño especial, desde el instante en que te conocí. Bajaste en ese ascensor con ese gorrito de tela celeste y unos ojos que decían muchísimas cosas desde la inmensidad del silencio. Yo tenía 10 años, y recuerdo que esa mirada me penetro”.
“Sos muy valiente bebé, sé que muchas personas del otro lado se sienten identificados/ das contigo, y seguramente junten fuerzas para sacar todo aquello que les hace daño. Valen la pena esos 3 herpes. Te amo con todo mi ser, no podría decir cuánto, pero si con cada pedacito de mis cuerpos”, siguió la actriz.
“Somos una gran familia, con nuestros defectos y virtudes, con nuestras emociones e historias. Los amo y me siento muy agradecida de la familia que elegimos”, concluyó Flor.