Agua, malta, levadura y lúpulo. Esos son los cuatro ingredientes principales para hacer una cerveza. Este último es una planta trepadora y es la responsable de aportarle el característico aroma y amargor a la bebida. Lo que no muchos saben es que el lúpulo es de la familia de las cannabáceas, por lo que están emparentadas con el cannabis.
En búsqueda de una mayor exploración, los cerveceros artesanales se dispusieron a hacer cervezas cannábicas, al tratar de reemplazar parcialmente al lúpulo con el cannabis, o con sus aceites esenciales, con el fin de darle a sus birras las notas de aroma y sabor típicas de un cogollo.
Para empezar, hay que tener en cuenta que, todavía, en Argentina es ilegal la utilización de marihuana para la realización de otros productos, por lo que los cerveceros tienen que apelar a conseguir los compuestos aromáticos que existen en estas plantas para poder añadirlos a las cervezas.
Los terpenos son compuestos aromáticos que están dentro de los aceites esenciales de las flores o las frutas y de los cuales se pueden extraer para crear estas esencias. Existen compuestos con perfiles herbales, pináceas, alimonados y hasta frutados.
“La Hemp IPA es una American IPA de la costa Oeste, donde se espera una birra seca, amarga, alcohólica, muy aromática, con los perfiles de los principales lúpulos de esa zona”, que son cítricos y resinosos, detalló el cervecero. A este perfil, se le suma el del cannabis, que dependerá de la variedad que se use.
“Un perfil de Jack Herer, Purple Daisies y Amnesia es la combinación de ‘Doctor Cogoyo’, una Hemp IPA que además tiene 25 gramos de lúpulos Simcoe y Citra por cada litro de cerveza”, explicó Maximiliano Pazos, alias “Mad Max”, brewmaster de la cervecería.
BrewHouse es también otra de las fábricas que trabajan en proyectos para que se pueda permitir la destilación directamente de la flor del cannabis. Cuando comenzaron a experimentar con los terpenos lo que más disfrutaron fue en la selección el componente aromático y del sabor.
“A nosotros nos gusta mucho jugar con esto y le hemos encontrado la onda. Estamos trabajando para poder extraer nuestros propios terpenos porque nos especializamos en este tipo de cervezas cannábicas”, añadió.
Una birra que llama la atención
Respecto de la aceptación del público, el cervecero de BrewHouse resaltó que las cervezas cannábicas “se venden mucho” dado que “hay mucho consumidor de marihuana en el mundo”. “La gente queda como loca, no puede creer lo que está tomando”, definió.
En este sentido, Vidal comentó que los clientes que las consumen pretenden tener un “flashback a la planta o a un cogollo recién molido” en el momento en el que abren una lata o reciben una pinta en los bares cerveceros.
Otra de las grandes fábricas que elabora estas cervezas de moda es Tacuara. La reconocida cervecería dueña de varios bares en la Ciudad de Buenos Aires, San Fernando y Rosario tienen en su línea fija “Churrito”, una Hazy IPA en la que “se asoman esos perfumes irreverentes que tanto nos gustan cuando aparecen en los bolsillos de un amigo o amiga”.
Gabriel Furnari, maestro cervecero de la fábrica, comentó que junto con los terpenos le agregaron algunos “yuyos naturales” del estilo del cedrón, cáscara de limón, de naranja lemongrass y palosanto. Estas se combinan en diferentes cantidades, infusionadas en alcohol alimenticio o en ron para extraer de manera natural los aromas, “al estilo tinturas madres”.