Después de un fin de semana largo, se retomó la circulación más fuerte por los trabajadores esenciales que tienen permitido moverse entre la Ciudad y la Provincia. En el primer día hábil en el que rige el confinamiento implementado por el gobierno, se registraron demoras en varios accesos.

Esto se debe a los controles más minuciosos que se están llevando a cabo tanto a vehículos particulares como en el transporte público. Solo pueden transitar los trabajadores esenciales y personas exceptuadas por alguna de las situaciones particulares estipuladas. Por las demoras, luego de algunas horas liberaron los controles en la bajada de Lugones.

Los principales embotellamientos se vieron en el Puente Pueyrredón, La Noria, en el peaje de la autopista Ricchieri a la altura del Mercado Central, en la Buenos Aires La Plata y también en la bajada de la Avenida Lugones y Sarmiento. 

Las fuerzas de seguridad de la Nación, porteñas y bonaerenses realizan operativos en conjunto para reforzar los controles en estos tres días que quedan de la semana. El Gobierno dispuso que unos 11.500 efectivos se apostaran en los retenes.