La receta del “Chocomisú” o “Tiramitorta”, como te parezca mejor decirlo, es sumamente sencilla y con pocos ingredientes, pero seguro que te va a salvar en una tarde como esta.
El motor de su filosofía fue la polémica. Sus clases seguían el modelo platónico de debate, con una dinámica horizontal guiada por preguntas y respuestas.